El ejercicio es fundamental para mantener un estilo de vida saludable y disfrutar de una buena calidad de vida; además, sus beneficios son numerosos y abarcan tanto el cuerpo como la mente.

Sin embargo, para aprovechar al máximo tu entrenamiento y evitar molestias digestivas, es importante tener cuidado con lo que comes antes de hacer ejercicio.

De acuerdo con Mayo Clinic, comer demasiado antes de hacer ejercicio puede dejarte con una sensación de aletargamiento. Si comes muy poco, es posible que no tengas la energía que necesitas para mantenerte suficientemente fuerte para hacer la rutina de ejercicios.

Entre los alimentos que se deben evitar antes de ejercitarte se encuentran aquellos que son altos en grasas saturadas y grasas trans, como las comidas fritas, alimentos procesados y bizcochos.

Estos alimentos pueden ser difíciles de digerir y pueden provocar malestar estomacal y pesadez, lo que afecta negativamente el desempeño durante el ejercicio.

¿Cuáles sí puedo consumir?

Asimismo, el sitio de salud indicó que la mayoría de las personas puede comer refrigerios pequeños justo antes de hacer actividad física y durante esta, los cuales son:

• Una barra energética.
• Un guineo, una manzana u otra fruta fresca.
• Yogur.
• Batido de frutas.
• Un bagel o galletas de harina integral.
• Una barra de granola con bajo contenido de grasa.
• Un sándwich de mantequilla de maní.
• Jugo diluido o bebida deportiva.