¿Sabes de qué trata la neurocirugía endovascular? ¿Conoces qué técnicas se utilizan en esta rama de la medicina para evaluar y tratar lesiones en el cerebro? Las técnicas de neurocirugía endovascular han representado un avance de mucha envergadura en la neurocirugía de las últimas dos a tres décadas.

Los adelantos tecnológicos han facilitado el desarrollo de nuevos equipos y materiales que hacen posible el tratamiento de lesiones vasculares y espinales que anteriormente no podían ser tratadas o que podían requerir cirugía de alto riesgo. Estos métodos son menos invasivos y pueden tener resultados similares o aún superiores a los de una cirugía. El tener una condición neurovascular, sea un aneurisma cerebral, una malformación arteriovenosa cerebral o espinal, un tumor vascular o un disturbio de falta de circulación o infarto cerebral es razón suficiente para sentirse angustiado. Los pacientes con estas condiciones necesitan una evaluación por un especialista en neurocirugía vascular y endovascular, ya que no todos son candidatos para estos tratamientos.

Estos tratamientos consisten en colocar un microcatéter del tamaño de un hilo de pescar dentro de la lesión de interés para luego colocar materiales que crean un coágulo sólido de sangre o émbolo dentro de lo que deseamos tratar. De ahí surge el término “embolizar”. En esta forma se rellena un aneurisma con filamentos de platino o coils, por su término en inglés, con o sin la ayuda de mayas o stents para reforzar o proteger la arteria madre. También, las malformaciones vasculares se pueden embolizar o rellenar de material a base de pegamento acrílico y partículas, entre otros. Estos procedimientos reducen el riesgo de ruptura o stroke hemorrágico cerebral. Si bien son procedimientos mínimamente invasivos, ello no implica que están fuera de riesgos y posibles complicaciones. Requieren de un seguimiento regular al menos anualmente, ya que, incluso, hay riesgo de recurrencias. La presión sanguínea descontrolada, otras condiciones médicas y el uso de cigarrillo y de drogas intravenosas como la cocaína y las anfetaminas, pueden aumentar este riesgo.

Otro procedimiento que se realiza con frecuencia es la angioplastia y stent de las carótidas en el cuello. Cuando las carótidas están obstruidas con placas de colesterol y calcio, y si especialmente están causando problemas de falta de sangre al cerebro o si están muy tapadas, se dilatan con un globo para luego colocar una malla o stent. Un problema neurológico súbito asociado a disturbios de la fuerza y la sensación de un lado o disturbio del habla o visión puede requerir terapia de revascularización o destape de una arteria cerebral de forma emergente mediante el uso de stents retractables, aspiración o sustancias que disuelven coágulos.

Los procedimientos endovasculares se pueden realizar en combinación con terapia de radiocirugía o cirugía vascular abierta. Un neurocirujano especialista en condiciones neurovasculares te dirá si requieres tratamiento o no, basado en el riesgo de sangrado o de alguna complicación. También te orientará sobre cuál es la mejor manera de combinar los tratamientos, si así lo entiende. Es importante enfatizar que no porque sean métodos mínimamente invasivos son en todos los casos menos riesgosos. Existen casos en los que la cirugía abierta es la alternativa de menos riesgo, y es importante tener esta discusión con el especialista que recomendará lo más efectivo y seguro. Una vez completado el tratamiento, puede ser necesaria la rehabilitación con terapia física, ocupacional o del habla, de acuerdo con lo que entiendan necesario el neurocirujano y el especialista en rehabilitación.

Para información, te puedes comunicar con nuestras oficinas, llamando al 787-777-3535, extensión 5447, Clínicas de Cirugía Neuroendovascular; al 787-765-8276, Departamento de Neurocirugía de la Escuela de Medicina; o al 787-777-3535, extensión 6758, Centro de Radiocirugía por Gamma Knife Nathan Rifkinson. Para citas en la Escuela de Medicina, marca el 787-758-7908.

El autor es especialista en neurocirugía vascular y endovascular y radiocirugía por Gamma Knife de la Escuela de Medicina de la Universidad de Puerto Rico.