Se acerca la hora de que los pequeños regresen al salón de clases y una de las mayores preocupaciones de los padres es su alimentación. Así que debemos buscar la manera de que las meriendas que consumen los niños sean prácticas, pero, al mismo tiempo, saludables para que le aporten esos nutrientes que son importantes para su desarrollo.

Según la licenciada Cinthia Santiago, nutricionista y dietista adscrita al Programa para la Prevención y el Control de la Diabetes del Departamento de Salud (DS), la merienda desempeña un papel importante en la alimentación y el desarrollo de los niños en edad escolar.

“La merienda es una pequeña comida que se puede consumir entre el desayuno y almuerzo y/o entre el almuerzo y la cena, que es de gran importancia para los menores porque aporta energía, controla su apetito, mejora su rendimiento académico, brinda nutrientes esenciales y promueve los hábitos alimenticios saludables”, explicó la licenciada. Sabemos que, para su periodo escolar, los niños necesitan mantenerse activos y concentrados durante todo el día, por eso es indispensable consumir la merienda, además del desayuno y almuerzo.

“Después de varias horas sin comer, los niños pueden experimentar una disminución en sus niveles de energía, pueden sentirse ansiosos o irritables, lo que puede afectar negativamente su comportamiento y elecciones alimentarias. Pero una merienda saludable puede ayudarles a recuperar la energía e influye positivamente en el rendimiento académico de los niños”, señaló la experta en nutrición.

Sin embargo, la cantidad exacta de meriendas puede variar dependiendo de factores individuales como “el horario escolar, los requerimientos nutricionales del niño y actividad física que realiza o la condición de salud que padeciera. Algunos niños pueden necesitar una segunda merienda si tienen un horario escolar prolongado o si tienen un mayor requerimiento calórico debido a su actividad física”, aclaró Santiago.

Una merienda debe tener los nutrientes necesarios porque de eso depende que cumpla la función requerida son importante “los carbohidratos, las proteínas y las grasas saludables, proporcionan la energía necesaria para el cerebro, lo que ayuda a mejorar la concentración, la memoria y el aprendizaje”, dijo Santiago.

Al momento de comprar, es importante que los padres entiendan que son ellos los responsables de los alimentos que ingieren sus hijos, y el escogido de las meriendas debe tener como prioridad su sana alimentación.

“A la hora de comprar, es importante asegurarnos de ver esa etiqueta nutricional; ver la lista de ingredientes, aunque no los conozcamos todos. Si tiene muchos, eso quiere decir que es un producto ultraprocesado”. “Las meriendas deben incluir frutas, vegetales, lácteos, granos integrales y proteínas magras, lo que ayuda a asegurar que los niños reciban una variedad de nutrientes importantes mantener una buena calidad de vida”, mencionó la licenciada Santiago.

No obstante, en el ejercicio de escoger las meriendas, la experta sugiere no olvidar los gustos del niño. “A pesar de que queremos incorporar al niño nuevos sabores, tenemos que tomar en consideración sus gustos y preferencias; si le gustan unas galletas en particular, podemos buscar dentro de sus gustos, unas que sean más saludables”, sugirió la nutricionista.

Para que esas meriendas sean prácticas y de igual forma costo efectivas, la nutricionista recomienda primero revisar lo que tenemos en casa y los especiales en los diversos comercios.

“Podemos averiguar qué tenemos ya en la lacena antes de ir a comprar, para ser más costoefectivos. Qué pudiera utilizar que me sirva para crear las meriendas y así me economizo dinero y tiempo. Además, pueden revisar los shoppers y buscar qué productos están en especial. Algunos vienen ya en porciones y se hace más sencillo a la hora de preparar las meriendas”, dijo la licenciada, quien, a su vez, advirtió acerca de ciertas meriendas ya preparadas que suelen verse en las loncheras de los niños.

“Hay que tener cuidado con estos paquetes de galletas con quesos y jamón que suelen darle a los niños como meriendas porque tienen más grasa de lo que los niños necesitan. Los embutidos que viene en bolsitas tampoco son las mejores opciones”, recalcó.

Aunque puede resultar un poco difícil que el niño se acostumbre a ingerir sus meriendas saludables, la experta recomendó que los padres busquen ser constantes en esa práctica para obtener los resultados esperados.

“Mantén una actitud positiva, sé perseverante y sigue ofreciendo opciones saludables. Con el tiempo, los niños pueden desarrollar gustos y preferencias mas amplias, en cuanto a alimentos saludables”, recomendó la nutricionista y dietista.

Ideas de combinaciones de meriendas saludables

1. Frutas y nueces: Una combinación clásica y saludable. Puedes incluir manzanas en rodajas con mantequilla de maní o almendras o una mezcla de frutos secos como nueces, almendras y pasas.

2. Palitos de vegetales y hummus: Corta zanahorias, apio (celery), pimientos frescos y pepinos (pepinillos) en palitos y sírvelos con hummus como dip. Es una opción nutritiva y rica en vitaminas.

3. Yogur y granola: Elige un yogur natural bajo en grasa y sin azúcar añadida, y acompáñalo con una porción de granola casera o sin azúcar.

4. Queso y galletas integrales: Opta por quesos bajos en grasa como el queso fresco o el queso cottage, y sírvelos con galletas integrales. Agrega algunas uvas o tomates cherry para mayor variedad.

5. Batidos de frutas: Prepara un batido con frutas frescas como guineo, fresas o mangó. Puedes agregar un poco de leche o yogur y mezclarlo todo en una licuadora. Sirve el batido en un recipiente hermético para llevar.

6. Sándwiches saludables: Prepara sándwiches con pan integral o pan de grano entero (whole wheat). Puedes usar ingredientes como pechuga de pavo o pollo, queso bajo en grasa, rodajas de tomate y hojas de lechuga o espinaca.

7. Rollitos de jamón y queso: Enrolla en una plantilla pequeña o mediana una rebanada de jamón magro alrededor de un palito de queso bajo en grasa. Puedes agregar rodajas de pepinillo o zanahoria para añadir más nutrientes.

Otras opciones por cada grupo de alimento

1. Frutas: Puedes colocar una pieza de fruta fresca como una manzana, china, mandarinas, guineo o unas rodajas de piña.

2. Lácteos: Opta por un yogur natural, un envase porcionado de leche, queso bajo en grasa o un batido de leche con frutas.

3. Granos enteros: Incluye una rebanada de pan integral, barritas de granola, plantilla integral, una tostada de centeno o unas galletas integrales.

4. Frutos secos y semillas: Elegir entre una porción de Almendras o nueces.

5. Proteínas: Es posible incluir una rodaja de pechuga de pavo o jamón bajo en sodio.

Bebidas

• Agua: El agua es la mejor opción para mantenerse hidratado. Incluye una botella de agua reutilizable para que los niños la llenen en la escuela.

• Leche: Es una fuente importante de calcio y proteínas. Puedes incluir un envase porcionado de leche baja en grasa o leche sin lactosa, dependiendo de las necesidades y preferencias de los niños.

• Jugo de frutas naturales: Aunque es preferible que los niños consuman frutas enteras, ocasionalmente puedes incluir un pequeño envase de jugo de frutas 100 % naturales y sin azúcar añadida. Asegúrate de escoger opciones sin conservantes ni colorantes artificiales.

• Infusiones de frutas y/o vegetales: Para una opción sin cafeína, puedes preparar infusiones con rodajas de limones, chinas, pepinillo fresco. Estas bebidas son refrescantes e hidratantes, lo cual motiva al estudiante a beber agua.

Batidos de frutas: (Para la casa) Prepara frapés o batidos de frutas caseros utilizando frutas frescas y leche baja en grasa o yogur natural. Evita añadir azúcar adicional y opta por endulzarlos con frutas frescas o congeladas.