Descuidar tu higiene oral pudiera causarte enfermedades cardiovasculares. Es sorprendente, pero, múltiples estudios recientes han encontrado una relación entre las enfermedades bucales y las enfermedades del corazón, e, incluso, del cerebro.

Por ejemplo, las enfermedades de las encías, como la gingivitis o la periodontitis, pueden aumentar el riesgo de que sufras un ataque cardiaco.

En un artículo publicado en la revista digital de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, el doctor Robert Schmerling explica tres posibles formas en las que están relacionadas la salud oral y las enfermedades del sistema cardiovascular:

1. Las bacterias que infectan las encías viajan a otras partes del cuerpo a través de la sangre, donde provocan inflamación y daño de los vasos sanguíneos. Como consecuencia, pueden aparecer pequeños coágulos sanguíneos que desencadenan en ataques cardíacos o accidentes cerebrovasculares. Cabe destacar que el tratamiento con antibióticos no ha demostrado ser eficaz para reducir el riesgo cardiovascular.
2. La respuesta inmunitaria del cuerpo (inflamación) es otra posibilidad. En lugar de que las bacterias causen el problema, la inflamación desencadena una serie de daños vasculares en todo el cuerpo, incluidos el corazón y el cerebro.
3. Factores de riesgo comunes para ambas enfermedades, como el consumo de tabaco, también pueden ser la causa. Además, factores externos, como el acceso limitado a la atención médica, la falta de ejercicio o una mala alimentación, pueden afectar la salud bucal y cardiovascular.

Los hallazgos indican que la población de la tercera edad es particularmente vulnerable a ver su cuidado de la salud limitado por múltiples razones, que incluyen la disminución de ingresos, la movilidad reducida y la falta de acceso a servicios de salud adecuados.

Para cuidar tu salud oral y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, puedes observar los siguientes consejos:

• Seguir las recomendaciones de tu dentista sobre el uso regular del hilo dental y cepillado, al menos, dos veces al día. Así eliminarás o evitarás la acumulación de placa para prevenir enfermedades de las encías.
• Visitar regularmente a tu dentista. Debes recordar que las citas de cuidado preventivo con este especialista deben ser cada seis meses. Este monitoreo periódico te ayudará a detectar temprano cualquier posible problema oral, y así prevenir complicaciones.
• Llevar una dieta balanceada. Además de ser bueno para tu salud en general, limitar el consumo de alimentos y bebidas azucarados y ácidos, también puede proteger tus dientes y encías de las caries.
• Evitar el tabaco. Fumar y consumir tabaco es perjudicial para tus pulmones y también para tu salud bucal, porque puede aumentar tu riesgo de enfermedades de las encías y cáncer bucal, lo que acelera los procesos inflamatorios que pudieran afectar tu sistema cardiovascular.
• Controlar el estrés. Padecer de estrés crónico puede debilitar tu sistema inmunológico y causar inflamación, incluso en las encías. Encontrar formas saludables de controlar el estrés, como realizar ejercicios o practicar la atención plena y técnicas de relajación, puede beneficiar tanto tu salud bucal como cardiovascular.

Al cuidar tu salud bucal, no solo estás protegiendo tu sonrisa, sino también tu corazón. Adoptar buenas prácticas de higiene bucal como parte integral de tu cuidado de salud redundará en múltiples beneficios que te ayudarán a vivir plenamente.