Si eres asmático, es importante que sepas que existen alimentos que pueden ayudarte a manejar mejor esta condición, mientras que hay otros que pueden exacerbar los síntomas y empeorarlos. Por ello, es necesario vigilar tu ingesta de alimentos para poder mantener el asma bajo control.

Hay que establecer que el asma es una enfermedad crónica que afecta las vías respiratorias. Esta condición causa que las paredes internas de esas vías respiratorias, por donde el aire entra y sale de los pulmones, se inflamen y se estrechen. Sin embargo, aunque es una enfermedad crónica que no tiene cura, sí se puede controlar.

Según los datos del Sistema de Vigilancia del Programa de Asma del Departamento de Salud (DS), “en Puerto Rico, aproximadamente 1 de cada 7 niños y 1 de cada 9 adultos tienen la condición, por lo que la prevalencia es más alta en niños y adolescentes (0 a 14 catorce años) con un 14.1%, mientras que la prevalencia en adultos de 18 años en adelante es de 11.1%”, así lo confirmó Ibis Montalvo Félix, educadora en salud y coordinadora del Programa de Manejo y Control de Asma de la División de Enfermedades Crónicas del Departamento de Salud, quien, a su vez, mencionó que la región de mayor prevalencia de asma en Puerto Rico, tanto para niños como para adultos, es la de Arecibo.

Esto muestra cuán adentrada está la condición en la sociedad puertorriqueña, por lo que es importante comenzar a crear hábitos alimentarios que sean beneficiosos para que los pacientes asmáticos puedan tener una mejor calidad de vida.

Michael J. González, biólogo, experto en medicina ortomolecular y catedrático de la Escuela de Salud Pública del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) de la Universidad de Puerto Rico (UPR), establece que el asma es “un desbalance inmunológico” que puede deberse a la genética o al ambiente y también coincidió en que los síntomas pueden complicarse cuando ingerimos ciertos alimentos, ya que estos pueden provocar inflamación.

“Hay alimentos que son proinflamatorios y hay pruebas para ver si la persona reacciona a ellos. Los alimentos que generalmente debes evitar son el huevo, la cebada, los lácteos, el aceite de maíz y el aceite de canola. Esos son los alimentos más reactivos. Todas esas cosas tienden a tener una reacción inflamatoria en las personas susceptibles”, explicó González.

Según el experto, el problema es que esas son reacciones de unas moléculas llamadas leucotrienos, prostaglandinas y citoquinas que están presentes en el cuerpo, pero que lo afectan cuando se descontrolan.

“El cuerpo produce las moléculas proinflamatorias y las no inflamatorias, ambas son importantes porque es el balance. Esas moléculas proinflamatorias son necesarias, pero, cuando se desbalancean crean un proceso inflamatorio”, dijo el catedrático.

Luego de que un paciente asmático consume estos alimentos y le ocasionan esa reacción inflamatoria, González aseguró que es necesario “crear un balance” para que la persona no tenga complicaciones en su condición. Ese balance puede lograrse a través de otros alimentos y suplementos.

Alimentos que te pueden ayudar

La licenciada Cinthia Santiago, nutricionista y dietista del Programa para la Prevención y Control de Enfermedades Crónicas como la Diabetes y el Asma del DS, estableció que la ingesta de alimentos es importante para controlar la condición del asma.

“Aunque se necesita una mayor cantidad de investigaciones sobre el efecto de los alimentos en la exacerbación del asma, sin lugar a dudas, las alergias a los alimentos, pueden desencadenar signos y síntomas de esta enfermedad”, expresó la licenciada.

Para lidiar con el asma y evitar inflamaciones, la licenciada Santiago recomienda llevar una dieta mediterránea “por su efecto antiinflamatorio, por su alto contenido de ácidos grasos esenciales, fibra, fitoquímicos y antioxidantes para prevenir o modular el asma”.

Esta dieta sugiere un consumo mayor de frutas y vegetales, aguacate, pescados y mariscos, aceite de oliva extra virgen, hierbas y especias como condimentos y alimentos altos en fibra.

A su vez, la nutricionista recomendó el consumo de vitaminas del complejo B, vitamina C, vitamina D, vitamina E y omega-3.

Mientras que González recomendó específicamente alimentos como “la papaya, la piña, el turmeric (curcumina), aceites de pescado y el salmón, que es el que más omega-3 tiene porque estos ayudan a tratar de reducir la inflamación”.

En el caso de una emergencia con ataques de asma, el catedrático aconsejó utilizar el café como remedio inmediato.

“Si la persona tiene un problema de asma rápido y no tiene medicamentos, lo que tiene que hacer es usar cafeína, el café más fuerte que tenga [debe] tomarlo porque eso le puede abrir los bronquios”, enfatizó.

González también sugirió el uso de suplementos como la bromelina, que es la enzima de la piña.

“Lo que pasa es que estas enzimas, si te la tomas como antiinflamatorio, tienes que tomarlas con el estómago vacío para que las pueda absorber más porque la enzima que el cuerpo absorba y circule es la que te va a servir de antinflamatorio”, indicó el profesor del RCM.

¿Qué alimentos pueden causar reacción inflamatoria?

Ambos expertos coincidieron en que hay ciertos alimentos que son alérgenos y deben ser evitados por los pacientes asmáticos a menos que se tenga una prueba negativa de reacción.

Los alimentos con mayor reacción inflamatoria son: el huevo, los lácteos, las nueces, el trigo, el maní, la soja, la cebada, el aceite de maíz y el aceite de canola.