La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad del sistema nervioso central en la que el sistema inmunitario ataca el cerebro y la médula espinal, ocasionando daños en la mielina e interrumpiendo las señales hacia y desde el cerebro, según establece la Federación Nacional de Esclerosis Múltiple. Se estima que cerca de 2.8 millones de personas padecen de esta condición en el mundo y aún se desconocen sus causas. Tampoco hay una respuesta de por qué afecta a algunas personas y no a otras.

Los efectos y las señales de esta enfermedad neurodegenerativa crónica pueden ser desde leves a graves y variar de acuerdo con la ubicación del daño al sistema nervioso y de factores genéticos o ambientales.

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A pesar de que constituye una enfermedad incurable, sí es posible identificar algunas de las señales tempranamente e implementar un tratamiento que, de acuerdo con la Clínica Mayo, acelere la recuperación de los ataques, cambie el curso de la enfermedad y controle los síntomas. A continuación, algunas de estas.

La esclerosis múltiple es una enfermedad del sistema nervioso que afecta al cerebro y la médula espinal, lo que hace más lentos o bloquea los mensajes entre el cerebro y el cuerpo, llevando a los síntomas.
La esclerosis múltiple es una enfermedad del sistema nervioso que afecta al cerebro y la médula espinal, lo que hace más lentos o bloquea los mensajes entre el cerebro y el cuerpo, llevando a los síntomas. (Shutterstock)

La esclerosis múltiple afecta la función sexual

La esclerosis múltiple afecta el sistema nervioso central, que es el que posibilita la excitación sexual. De esta forma, la enfermedad puede provocar cambios en las sensaciones o reacciones sexuales, según señala la Sociedad Nacional de Esclerosis Múltiple, de Estados Unidos (NMSS, por sus siglas en inglés).

Entre los efectos sexuales primarios se encuentran la alteración de las sensaciones genitales y la disminución del deseo sexual.

En las mujeres, los síntomas más comunes incluyen: pérdida de libido, cambios sensoriales incómodos en la zona genital, sequedad vaginal y pérdida o dificultad para alcanzar orgasmos.

Los hombres podrían presentar dificultad para mantener una erección, menor sensación genital, eyaculación rápida e incapacidad de eyacular.

Trastornos visuales

De acuerdo con la Revista Portales Médicos, publicación dirigida a los profesionales de la salud de habla hispana, los trastornos visuales provocados por la esclerosis múltiple suelen surgir como consecuencia de la neuritis óptica o los trastornos del movimiento ocular.

La neuritis óptica, es decir, la inflamación del nervio óptico, afecta la coordinación visual y causa visión borrosa o la pérdida de la vista en uno de los ojos. El deterioro de los circuitos nerviosos que controlan los movimientos oculares también podría provocar distorsión de los colores rojo y verde, y en los destellos de luz en el campo de visión, indica la Fundación de Esclerosis Múltiple de Puerto Rico (FEMPR).

Dolores musculares

El rigor muscular involuntario, presente hasta en el 80% de las personas con esclerosis múltiple, puede interferir con el movimiento, el habla y el modo de andar, indica la NMSS.

Como consecuencia de la conexión entre el cerebro y los músculos, las personas con esclerosis múltiple podrían sufrir de espasmos y dolores musculares, o espasticidad (un aumento en el tono muscular) que afectan su movilidad, equilibrio y coordinación, añade la organización. Otras señales son los temblores, la torpeza de las extremidades, el entumecimiento y los movimientos involuntarios.

Problemas mentales

Dado que la esclerosis múltiple afecta regiones cerebrales que controlan las emociones, las personas que padecen de esta enfermedad posiblemente experimenten síntomas relacionados a la salud mental, reveló el Multiple Sclerosis Trust.

La FEMPR enumeró la depresión, el estrés, la ansiedad, la irritabilidad como algunos de los trastornos mentales más comunes. Otros síntomas incluyen: la deficiencia cognitiva, la falta de concentración, disminución del período de atención y la pérdida de memoria.

Disfunción intestinal

Los daños al intestino podrían agravar otros síntomas de la esclerosis múltiple como la disfunción de los músculos y la vejiga, que incluyen orinar con mayor frecuencia y la ausencia de control de los esfínteres del sistema digestivo.

La reducción de actividad física, los daños en la movilidad de los alimentos por el tracto intestinal, los efectos adversos de los medicamentos y la poca ingesta de líquidos ocasionan estreñimiento, diarrea o pérdida del control de los intestinos, explicó la NMSS.