Los hospitales actúan ante la crisis de salud
La Asociación de Hospitales de Puerto Rico y sus hospitales miembros apuestan al mejoramiento de nuestro sistema de salud
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Los retos que enfrenta la industria de salud en Puerto Rico son cuantiosos y han colocado al gremio en un cruce forzado donde se deben contemplar soluciones creativas para atender el panorama crítico de la comunidad médica y las instituciones hospitalarias del país.
Este escenario se nutre de una cadena de factores que, según se discutiera en el Foro del Sector de la Salud del Colegio de Contadores Públicos Autorizados (CCPA), el pasado 10 de agosto de 2023 y reseñado por El Nuevo Día, sobresalen la falta de personas elegibles para renovar sus cubiertas con el Plan de Salud Vital del Gobierno de Puerto Rico, las transformaciones en el pago de las primas, las propuestas legislativas para aumentar el salario mínimo, los recortes futuros a los fondos federales y el éxodo de personal capacitado para ejercer su oficio en el campo. Estos asuntos, según divulgó el director ejecutivo del Sistema de Salud Menonita, Ricardo Hernández, en dicho artículo, de permanecer desatendidos, repercutirían en el cierre eventual de hospitales o la fusión de estos.
Ante esta situación, el presidente ejecutivo de la Asociación de Hospitales, el licenciado Jaime Plá Cortés, afirmó que uno de los grandes imperativos para velar por la continuidad y la calidad de los servicios recae sobre la “estabilidad del financiamiento de la salud”, la cual, según reflexionó, debe poder “asegurar que los reembolsos a los hospitales estén de acuerdo con la inflación y consideren los gastos que estamos viendo en la industria”.
Sobre este particular destacó que la comunicación con los distintos cuerpos que inciden sobre el sistema de salud pública de Puerto Rico —como el gobierno estatal, la legislatura, las aseguradoras y el gobierno federal— es fundamental, ya que este último es, “de una manera, responsable del 70 % del financiamiento de nuestro sistema y los procesos que ellos visualizan dependen, en gran medida, de este financiamiento”, acertó.
Por otro lado, Plá Cortés arrojó luz sobre las trabas en el componente laboral de un sistema que hace mucho lleva sufriendo una merma en su mano de obra y que ha surgido de manera más palpable desde la pandemia, puesto que “no se consiguen suficientes empleados y el trabajo de la salud es muy cuesta arriba. Son cerca de 50 profesiones y oficios que, de una manera u otra, mantienen a los hospitales operando y brindando los servicios a los pacientes, y en la asociación estamos trabajando mucho para tratar de mantener una fuerza laboral activa y que pueda seguir trabajando”, sostuvo el licenciado, al comparar cada hospital con una “máquina” en la cual, “si una pieza no está funcionando, el aparato completo no va a correr”.
La Asociación de Hospitales no está ajena a los desafíos que sacuden la operacionalización diaria de los servicios médicos en la isla. Esta, así como todas las instituciones que proveen servicios esenciales, se ha tenido que adaptar a las crisis y las emergencias de los desastres naturales que, desde el huracán María, han amenazado su supervivencia.
En un intento de prevenir un mayor éxodo de talento y producir mayores oportunidades que garanticen la permanencia de la comunidad médica en el archipiélago, la Asociación de Hospitales apoyó una legislación para aumentar el salario de los profesionales médicos y colaboró directamente en los centros de formación académica salubrista en la creación de residencias y “oportunidades para que los doctores se queden en Puerto Rico, haciendo sus residencias y no se nos vayan”, sostuvo el licenciado Plá Cortés, quien ocupa el cargo de presidente ejecutivo de la asociación hace 17 años. Asimismo, actualmente, la institución apoya proyectos legislativos ante la consideración del gobernador Pedro Pierluisi, que prometen brindar “inmunidad del estado a los residentes en el estudio y la práctica de las residencias”, así como garantizar mejores reembolsos a los hospitales, “que sirvan de sede de práctica de residencias médicas”, señaló Plá Cortés.
Por último, la Administración de Recursos Humanos y Servicios de Salud (HRSA, en inglés) divulgó que 72 de los 78 municipios se consideran áreas sin los servicios necesarios de salud (underserved), de acuerdo los estándares de cuidado establecidos por la agencia. El director ejecutivo de la Junta de Supervisión Fiscal, Robert Mujica, anunció en el foro del pasado 10 de agosto que “Puerto Rico cumple con menos del 9 % de la demanda de atenciones primarias, 14 % de la demanda de cuidado dental y 13 % de la demanda de salud mental”, aseveró.
En atención a esta cifra, la asociación realiza actividades de carácter educativo por vía de su Programa de Garantía y Calidad para mejorar los parámetros de calidad en áreas como caídas, inspecciones y readmisiones, así como para sobrellevar otros mecanismos de monitoreos de calidad en más de 50 hospitales por todo Puerto Rico.
“El camino es largo y son muchos los percances, pero tenemos que actuar todos los días porque hay mucha necesidad”, subrayó Plá Cortés.
La autora es periodista colaboradora de Suplementos.
Este contenido comercial fue redactado y/o producido por el equipo de GFR Media.