Con la llegada de las vacunas para combatir el COVID-19, se ha creado una falsa concepción de que la pandemia está por terminar. Esto dista mucho de la realidad. Ahora es cuando más alerta debemos estar y no dejar bajar la guardia, especialmente para los pacientes que padecen insuficiencia renal.

Además de las medidas de distanciamiento, protección con mascarilla y desinfección continua, fortalecer su sistema inmunitario es la mejor línea de defensa para combatir de manera natural las infecciones, las bacterias y las enfermedades.

Un paciente que se dializa tiene que vigilar cuatro aspectos de la dieta renal: mantener una ingesta alta de proteínas y baja en sodio, potasio y líquidos. Para que tengas una idea, un riñón saludable funciona las 24 horas, los siete días. La mayoría de las personas en hemodiálisis reciben tratamientos tres veces por semana durante aproximadamente cuatro horas por día. Los tratamientos de diálisis eliminan el desperdicio de proteína de la sangre del paciente, así como el sodio y el potasio que son minerales difíciles de filtrar y eliminar del cuerpo de los pacientes renales. Esto significa que los días que transcurren entre sus tratamientos de diálisis, su cuerpo retiene el exceso de líquido y el desperdicio que sus riñones no pueden eliminar. A medida que el sodio y el líquido se acumulan en los tejidos y el torrente sanguíneo, aumenta la presión arterial, lo que puede, a su vez, ocasionar fallo cardíaco congestivo y dificultad respiratoria. No obstante, en un perfecto balance, hay que remplazar dichas proteínas, comiendo alimentos altos en valor biológico, como: las aves, las carnes rojas, el cerdo, los huevos y el pescado.

Recomendaciones

Si eres paciente de diálisis, tu mejor aliado es robustecer tu sistema inmunitario, consumiendo vitaminas y minerales:

  • De 800 a 1,000 microgramos (mcg) de vitamina A, la cual se encuentra en alimentos como el melocotón, la zanahoria, el huevo y la calabaza;
  • 10 miligramos (mg) de vitamina B6, la cual se encuentra en el cerdo, las aves, los pescados, las papas dializadas y los cereales fortificados;
  • De 75 a 90 mg de vitamina C concentrados mayormente en chinas mandarinas y pimientos rojos;
  • 15 mg de vitamina E, que encuentras en la yema del huevo, la leche y los aceites vegetales; y
  • De 8 a 11 mg de zinc, que puedes encontrar en las carnes rojas, las aves y la leche baja en grasa.

La autora es directora del Departamento de Nutrición de Atlantis Health Care Group.