En Puerto Rico, aproximadamente unas 100 mil mujeres podrían estar confrontando problemas para concebir. Sin embargo, en el 30% de este grupo, esa dificultad no está en ellas, sino en ellos. El restante 60% es causado por problemas del útero, las trompas de Falopio, la ovulación y la anatomía pélvica, dijo el doctor Nabal Bracero, director médico de GENES fertility institute y profesor auxiliar en el Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico.

La mayoría de la gente no reconoce que la infertilidad es un problema y eso es una encrucijada fatal para los pacientes, sentenció el especialista en endocrinología reproductiva e infertilidad. “Esta es una enfermedad como cualquier otra que requiere una evaluación médica y tratamientos especializados”, abundó.

Condiciones en la anatomía pélvica como la endometriosis y las adherencias pélvicas; los problemas ovulatorios como el síndrome de ovarios poliquísticos o cuando la mujer no tiene suficientes óvulos, son causas comunes de infertilidad.

Otro grupo de pacientes —aunque más pequeño— tiene problemas con las trompas de Falopio o son mujeres esterilizadas.

La causa menos común está relacionada con los problemas del útero —un 10% de los pacientes que el especialista recibe en su práctica privada.

No obstante, el experto en temas de infertilidad estableció que la edad es el factor que más frecuentemente está incidiendo en la cantidad de mujeres con problemas para concebir.

“La mujer está posponiendo la búsqueda del embarazo y eso crea un impacto directo en la capacidad de buscar embarazo en la reserva ovárica. La mujer nace con una cantidad de óvulos que viene definida para acabar con la menopausia y los mejores óvulos se sueltan al principio de los años reproductivos. El pico de la fecundidad de la mujer es a los 25 años. Con el paso del tiempo, seguiremos viendo problemas de fertilidad asociados a la edad, porque a mayor tiempo, más difícil es quedar embarazada por la calidad de los óvulos”, especificó el galeno.

Para el profesor auxiliar del Recinto de Ciencias Médicas, esta tendencia puede ser un problema, ya que, al la mujer intentar quedar embarazada, puede enfrentar condiciones de salud subyacentes que, por la edad, pueden ser más difíciles de tratar, “no es lo mismo tratar la endometriosis a los 38 años que a los 28 años”, apuntó el doctor Bracero.

Factores de riesgo para problemas físicos

Aparte de la edad, el endocrinólogo reproductivo aseguró que existen diversos factores de riesgo que pueden complicar la búsqueda de un embarazo y recomendó tratar de identificar situaciones que ameriten que la paciente se evalúe, como desórdenes ovulatorios, como ocurre en pacientes que, en su adolescencia, sufrieron de dolor bien fuerte de menstruación con sospecha de endometriosis; mujeres entre los 20 y mayorres de 30 con irregularidades bien marcadas en la regla; pacientes que ven la regla cada tres meses o cada seis meses, o pacientes con menstruación que dura dos semanas.

Tener historial de cirugía en la pelvis, como por ejemplo, la remoción de un quiste grande de los ovarios o de un ovario; representa un factor de riesgo, ya que podrían desarrollarse adherencias que alteran la anatomía reproductiva; así como los problemas de sangrado (no de tipo ovulatorio), que hayan requerido múltiples raspados uterinos o haber tenido múltiples terminaciones de embarazo.

Pero, como dijo el experto en fertilidad, no siempre los problemas de infertilidad tienen que ver con la mujer, por lo que un factor de riesgo indirecto es si una mujer “se junta con un varón que tiene problemas de contaje (espermatozoides) bajo y no se ha detectado”.

A su vez, el doctor recomendó que, para reducir la posibilidad de enfrentar problemas para concebir, las personas planifiquen desde temprano en sus vidas cómo y cuándo comenzarán a buscar su familia.

“Los ginecólogos y los profesionales de la salud especialistas en fertilidad utilizamos el concepto de plan de vida reproductiva. Así como la gente hace planes de retiro y financieros, debe planificar, ya sea como individuo o pareja, cuándo quiere tener bebés, cuántos quiere tener, cuánto tiempo quiere tener entre un bebé y el otro. Se trata de que sea una planificación con estructura, que no sea una decisión tan espontánea”, recomendó el doctor Bracero, quien, a su vez, resaltó la importancia de que el plan de vida reproductiva sea parte de la educación de los estudiantes.

Factores psicológicos impactan los intentos de concebir

Cuando de factores psicológicos se trata, en su mayoría, son situaciones generadas por la misma frustración de los pacientes que no logran salir con éxito de procesos médicos para la infertilidad.

Según la doctora Debra Reuben, psicóloga clínica, una revisión bibliográfica reciente sobre la prevalencia de síntomas psicológicos en la infertilidad concluyó que entre el 25 y el 60% de las personas infértiles informan síntomas psiquiátricos y que sus niveles de ansiedad y depresión son significativamente más altos.

“No es tanto que los problemas emocionales afectan el proceso de tener un embarazo, es que la personas se afecta ante la dificultad de no lograr el embarazo deseado. Puede que se sientan ansiosos, hay depresión, sentido de pérdida, hay mucha incertidumbre y tienen que enfrentar unos procesos médicos que pueden ser mínimos o más invasivos. La gente piensa que no pueden controlar lo que más desean y lo que más anhelan en su vida”, explicó la doctora Reuben, experta en tratar pacientes afectados por temas de infertilidad.

El doctor Bracero coincidió en que el impacto emocional de intentos de fertilidad fallidos puede trastocar las vidas de los pacientes y sus deseos de seguir intentando. “No quedar embarazada genera estresores a la pareja o a la paciente. Si la paciente está sola, se le hace difícil llegar a buscar ayuda. El tener eventos adversos de no quedar embarazada después de haber hecho mucho esfuerzo es un factor de estrés emocional y psicológico fuerte’'.

Desde el punto de vista emocional, ‘’en Puerto Rico somos una cultura latina, donde hay machismo envuelto en las relaciones de pareja y, a veces, es difícil traer a los varones a que vengan a participar del tratamiento y crea este peso en los hombros de la mujer. A veces los varones son los que tienen el problema, y no es hasta después de mucho esfuerzo que hace la esposa, que él decide evaluarse. Con el tiempo, he visto que ha mejorado y cada vez vemos más esposos que están involucrados, pero todavía eso sigue siendo un reto”, comentó el doctor.

Busca el apoyo que necesitas

Hay señales de advertencia que indican que una persona atraviesa algún problema psicológico como resultado de intentos fallidos de embarazo.

“Muchas personas comienzan a aislarse de sus grupos sociales porque, por ejemplo, eres la única que no estás quedando embarazada, no quieres tener hijos, las conversaciones cambian y las actividades son más de cumpleaños, actividades escolares y, poco a poco, vas quedándote fuera de grupo”, detalló la psicóloga, quie, a su vez, afirmó que ya para el tercer ciclo de tratamientos de fertilidad es donde se empieza a ver que las personas en tratamiento se comienzan a afectar emocionalmente.

Según la psicóloga clínica, cuando esto ocurre, se presentan síntomas de depresión y ansiedad, entre otras situaciones, y la persona necesita ser atendida por un profesional de salud mental especializado en este tipo de casos de infertilidad.

“Es bien importante que, al momento de escoger un profesional de apoyo, si esa es la alternativa que uno desea, sea una persona preparada, una persona que conozca el tema, una persona con experiencia y preparación profesional en cuanto al impacto emocional de la infertilidad y de las pérdidas”, exhortó la doctora Reuben.

No obstante, la psicóloga recomendó grupos de apoyo en las redes sociales, como un podcast que se llama Infertilidad Latina, quienes también tienen presencia en Instagram y en Facebook. De igual forma, sostuvo que hay un grupo en los Estados Unidos que da apoyo internacional. Se llama Resolve y tiene una línea de ayuda que atiende personas de habla hispana. El número es el 1-866-668-2566, marcas la opción #8 para dialogar con alguien en español.

Para información acerca de los tratamientos para la infertilidad, llama a GENES fertility institute al 787-767-2220.