Las univeridades acogen la adaptación como un superpoder para el futuro
Las instituciones tienen la responsabilidad de gestionar los desafíos para responder con eficiencia a las necesidades de un mundo en constante cambio
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Adaptarse a las tendencias educativas e ir evolucionando en las metodologías de enseñanza son parte de las estrategias que han adoptado muchas universidades para establecer cursos, programas y herramientas tecnológicas que atraigan al estudiantado.
Las instituciones universitarias se han visto en la necesidad de adaptar sus estrategias, impulsadas por un sinnúmero de aspectos que han cambiado la manera en que vemos la educación. Pero los cambios han venido a sumar una ecuación positiva a la enseñanza.
“Hemos tenido fenómenos naturales, los huracanes María e Irma en el 2017, los temblores del 2020 y la pandemia, que nos obligó a un lockdown para el que muchas universidades no estaban preparadas. Aparte, hemos tenido un descenso poblacional y la migración que están impactando la natalidad, el cierre de escuelas y, obviamente, todo esto afecta a las instituciones universitarias, a unas en mayor grado que a otras”, planteó el doctor Cuauhtémoc Godoy, director del Centro para Educación Virtual e Innovación en el Aprendizaje de la Universidad Politécnica de Puerto Rico (UPPR).
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“El aspecto económico también afecta. Sabemos que hay mayor desempleo, el Gobierno de Puerto Rico se fue a la bancarrota. Además, el efecto de que universidades fuera de Puerto Rico vienen a reclutar estudiantes [a la isla]. Así que ha sido muy fuerte para las universidades locales”, dijo.
Todos estos aspectos, según el doctor Godoy, han impulsado a las universidades a implementar estrategias novedosas, atadas, principalmente, a la tecnología y a la flexibilidad, con el propósito de adaptarse a los tiempos y a las necesidades de los alumnos.
Aquí mencionamos algunos de los pasos que han dado las instituciones universitarias para adaptarse a los tiempos:
Adaptación #1 Cursos y programas completos en línea
La pandemia impulsó el desarrollo de programas de estudio en línea. Esa adaptación se convirtió en un “salvavidas” que funcionó no solo para atender una necesidad inesperada de conectar la enseñanza con el estudiante, sino que ahora es un modelo educativo que se adapta a los tiempos.
“El estudiante tiene otros retos económicos. Con los cursos en línea o programas completos en línea, puedes asistir al salón de clases de cualquier manera, aunque tengas un compromiso. En el caso de la Universidad Politécnica, esta no ha bajado su matrícula porque ha desarrollado cursos en línea y programas en línea que le permiten al estudiante trabajar y estudiar, o tener un internado en la industria y seguir con sus clases presenciales unos días, pero otros días las toma en línea”, expuso.
Adaptación #2 Clases asincrónicas
De este modelo en línea también han proliferado otras estrategias que han venido a brindar una variedad de escenarios. Tal es el caso de las clases asincrónicas, lo que significa que no requieren que el estudiante tome la clase en un horario en particular (en vivo), sino que puede tomarla en el tiempo que tenga disponible, pero con las mismas herramientas.
“El profesor tiene un equipo de profesionales que le ayudan a desarrollar el contenido instruccional, quiere decir que desarrollan unas lecciones que se convierten en módulos. Esas lecciones contienen lecturas y vídeos cortos. Se hacen cápsulas interactivas y atractivas”, indicó el doctor Godoy, quien dirige el centro que se encarga de preparar ese material instruccional para su universidad.
Con este método, además de que el estudiante tiene acceso a sus clases 24/7, también le permite estudiar cuantas veces sea necesario, así que llega al salón con el conocimiento para aplicar lo aprendido.
“El profesor graba la clase y el estudiante repasa esa conferencia en su casa antes de llegar al salón. Una vez en el salón se atienden las dudas y luego empieza el proceso de aprendizaje activo, haciendo ejercicios, haciendo discusión”, comentó el profesional.
Adaptación #3 Proceso de Enseñanza Activo
Los estudiantes exigen experiencias educativas que los involucren en el proceso, y no que sean solamente receptores pasivos. Esto ha llevado a las instituciones a brindar clases dinámicas que vayan más allá de las conferencias regulares.
“Los tiempos vienen tratando de decirle a la facultad que debemos cambiar el modelo de la estrategia educativa. Ya no podemos estar centrados en el profesor que llega al salón y da una conferencia por dos horas y el estudiante está sentado escuchando, porque esa educación es pasiva y no es el mejor modelo”, sostuvo.
“La efectividad de ese proceso de escuchar conferencias es de solo un 5 %, si lo complementas con lectura aumentas a un 10 %, si utilizas medios digitales subes al 20 %, si utilizas una demostración sube al 30 %. Si empiezas una discusión y una práctica de hacer lo que estás viendo o escuchando aumenta de un 50 a un 75 %”, aseguró Godoy.
Una de las formas para hacer de la educación una dinámica de aprendizaje es “utilizar conferencias sincrónicas que le permiten al profesor dar su clase, escribir en la pantalla en el ῾white boardʾ de Teams algún ejercicio y el estudiante puede verlo cuantas veces quiera”, describió.
Adaptación #4 Tecnología e Innovación en la Educación
Precisamente porque estamos ante el reto de educar a nuevas generaciones que buscan una experiencia educativa diferente, ya que desde muy pequeños han estado expuestos a la revolución tecnológica, hay universidades adaptando sus campus para que cuenten con tecnologías que aporten al proceso de enseñanza y atraigan a nuevos estudiantes.
Salones Inteligentes
“La Universidad Politécnica ya tiene un 95 % de sus salones inteligentes, donde utilizan la plataforma Learning Management System (LMS), de Blackboard, con la cual se graban las clases y se depositan, entonces el estudiante las puede ver cuantas veces quiera”, detalló el director del área tecnológica de la Politécnica.
En estas aulas, los estudiantes pueden recibir la enseñanza mediante una presentación de Power Point que el profesor proyecta en un cristal y empieza a escribir encima de ese cristal, pareciendo que escribe en el aire.
“Tenemos un software que captura esa imagen y la invierte para que el estudiante la pueda leer. De hecho, puedes colocar [una imagen ] del corazón humano y el profesor explica cómo opera. Así que tienes un cúmulo de tecnología que ayuda a que el material instruccional sea más atractivo, más cautivador. Tratamos de desarrollar un material que haga conexión emocional con el estudiante, porque cuando hay una conexión emocional, hay mayor aprendizaje y es más rápido también”, explicó.
El doctor Godoy sostuvo que estos cambios en el modo de impartir la enseñanza son un reto para los profesores, quienes continúan en un constante proceso de actualización para ir conforme avanza la tecnología.
Flexibilidad con el uso de equipos tecnológicos
En otros tiempos, utilizar los equipos electrónicos como celulares, tabletas y laptops no era bien recibido por parte de los profesores. Hoy en día, las instituciones se han adaptado para permitir el manejo de estos equipos en las aulas, con el propósito de ampliar las posibilidades de enseñanza.
“En el modelo tradicional se le dice al estudiante que guarde el celular o la tableta y no debe tener acceso al internet, sino que ponga atención a la pizarra. Pero el modelo educativo de hoy día es: trae tu celular, tableta o laptop, porque te vas a conectar al material instruccional interactivo. Se conectan a la pantalla inteligente y todo va a quedar grabado. Ese tipo de modelo de uso de tecnología es el que prefiere el estudiante de hoy”, dijo.
“En lugar de estar luchando contra la tecnología, es necesario que el profesor adapte su clase para que el celular se convierta en una herramienta poderosa de aprendizaje. Hay tantos softwares que permiten a los estudiantes aprender jugando. El estudiante ya no se da cuenta de que está aprendiendo, ya no es un esfuerzo; es un disfrute y es mucho más efectivo”, indicó.
Estudios de grabación
Otra iniciativa que ha venido a cambiar la experiencia educativa es la creación de estudios de grabación que los estudiantes pueden utilizar para mejorar sus destrezas de presentaciones orales.
“Tenemos unas instalaciones llamadas One Button Studio, que son estudios de grabación con apoyo técnico, pero también hay salas de grabación independientes, donde el estudiante puede desarrollar sus destrezas de presentación, que es una de las más valiosas que puede tener un estudiante”, dijo el experto, quien también mencionó que la Politécnica cuenta con un laboratorio de realidad virtual aumentada inmersiva y laboratorios que los estudiantes realizan de manera remota, con un kit especializado que tiene todos los elementos de un laboratorio regular.
Adaptación #5 Lidiar con los rezagos académicos
Por último, una de las principales adaptaciones que atraviesan las instituciones universitarias es poder manejar el rezago académico de una generación que ha visto su educación interrumpida por diversos aspectos.
“El efecto de la pandemia y los huracanes ha creado en nuestros estudiantes una serie de retos de aprendizaje, [pues] ya no llegan con las mismas destrezas y conocimientos. Ahora tenemos el reto de tratar de llevarlos al nivel necesario para que puedan tener éxito en los programas académicos. No pueden bajar el requerimiento académico, porque hay que prepararlos para el mundo laboral y ese ambiente es más retante”, sostuvo Godoy.
La autora es periodista colaboradora de Suplementos.
Este contenido comercial fue redactado y/o producido por el equipo de GFR Media.