Argos ha sido fiel a su compromiso de atesorar y cuidar el legado de 50 años de historia que heredó desde su llegada a la isla, pues la evolución de lo que hoy es Argos Puerto Rico comenzó en 1970. Con la integración de la Planta de Cemento en Dorado a la Terminal de Isla Grande, Argos se consolidó como el principal productor y comercializador de cemento en la isla, y en el Caribe Oriental, llevando allende los mares el símbolo que manos boricuas procesan y empacan cada día con gran esmero.

Detrás de cada saco de cemento Argos está el compromiso de muchos hombres y mujeres que trabajan mano a mano para ofrecer un producto de alta calidad y que contribuya en la construcción del presente y el futuro de nuestra isla.

La Terminal de Isla Grande, que cuenta con un puerto de aproximadamente 35 pies de profundidad, permite atracar buques de capacidades mayores a las 25,000 toneladas en una ubicación geográfica privilegiada. Esto hace de esta instalación un punto de distribución estratégico para la isla y un centro ideal para la exportación hacia el Caribe.

Por su parte, la planta de producción de cemento en el pueblo de Dorado, conocida anteriormente como San Juan Cement, se ha transformado, para atender las necesidades del mercado puertorriqueño, desde proyectos pequeños hasta las más grandes obras que dan testimonio de la grandeza de la infraestructura que nuestra isla alberga.

La solidez y la confiabilidad del sistema de procesamiento y distribución del cemento Argos en la isla están respaldadas por un gran equipo humano de más de 500 colaboradores directos e indirectos que, de la mano con un confiable sistema de mezclado y empaque de cemento, permite llevar al mercado productos de la más alta calidad con inmediatez.

Argos ofrece a sus clientes y al mercado en general acceso a un modelo de negocio diferenciado, centrado en el cliente y en el desarrollo sostenible, es decir, económicamente viable, respetuoso de las personas y responsable y amigable con el medioambiente.