Los médicos y nutricionistas, al referirse a la alimentación, en su mayoría mencionan que una de las comidas más importantes del día es el desayuno, pues es una de las formas de comenzar el día con la mejor energía.

Sin embargo, en algunas dietas para bajar de peso o el porcentaje de grasa se recomienda obviar esta comida, para que el cuerpo utilice las reservas de grasa por el tiempo que no se está consumiendo alimentos.

Muchas personas, especialmente por falta de tiempo, obvian desayunar, así como lo menciona la Universidad Adventista de Chile, cuyo estudio apunta a que alrededor del 70 por ciento de los estudiantes no desayunan, por falta de tiempo o dinero.

Esto les traía también dificultades para prestar atención y concentrarse en las clases de la mañana, registrando un número de 62.5 por cierto de estos estudiantes que no consumían ningún alimento en las primeras horas del día.

De acuerdo con la Secretaría de Salud de México, se recomienda desayunar una hora después de haber despertado, puesto que, según estudios, las personas que no desayunan tienen más riesgo de padecer diabetes y obesidad.

Además, los primeros alimentos que recibe el cuerpo, después del ayuno de la noche, son aquellos que funcionan como energía en las primeras horas del día, puesto que ya sea trabajando o estudiando, se desgasta gran parte de ella.

De acuerdo con la Universidad de Chile, aquellos alimentos que son los primeros en ingerirse en la mañana, el organismo los procesa rápidamente, puesto que el cerebro requiere los nutrientes necesarios para poder iniciar con su jornada diaria.

Cuando el tiempo de ayuno se extiende por varias horas del día, los médicos sugieren que puede haber una disminución en la glucosa y la insulina, lo que genera estrés orgánico en el cerebro, evidenciando una falta de memoria y atención a corto plazo.

Asimismo, es importante que se tenga en cuenta el porcentaje de calorías que corresponden al desayuno, pues con un 20 o 25 por ciento de este sumar a las calorías totales que cada cuerpo debe consumir.

La fórmula para conocer cuál es el requerimiento calórico diario es el siguiente, según la Secretaría de Salud de México para mujeres y hombres:

655.1 +(9.56 x Peso en Kilogramos) + (1.85 x Altura en centímetros) - (4.68 x Edad en años). Por ejemplo, para una mujer con 35 años, de 1.63 de estatura y 60 kilos de peso, la fórmula sería: 655.1 + (9.56 x60) + (1.85 x 1.63) - (4.68 x 35) Esto da como resultado: 1,366.45 calorías.

Según Harvard, un desayuno ideal debe contener alimentos de bajo índice glucémico, ricos en proteínas, fibra, vitaminas, minerales y grasas saludables, evitando los azúcares simples, la sal y las grasas de mala calidad.

Es decir, no debe incluir productos de panadería como muffins, galletas, ni pan, así como tampoco cereales procesados (incluyendo granola o muesli con azúcares y/o grasas), postres lácteos, zumos, bebidas de cacao o batidos.

Asimismo, recomiendan que se incluyan cereales enteros sin procesar como avena, trigo, cebada, quínoa, frutas y verduras frescas enteras, proteínas saludables no fritos como huevo, queso, yogur, carnes magras y grasas saludables como aceite de oliva, aguacate y frutos secos o semillas sin aditivos.

Recuerde que, ante cualquier duda, consulte con su médico y nutricionista.