Emotivas historias de adopción en parejas del mismo sexo
La idea de convertirse en padres fue contemplada durante un tiempo y concretada en el 2012.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 12 años.
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Adrián Avilés y David Gregg llevan nueve años de relación y el fruto del inmenso amor que se profesan se fotaleció más con el nacimiento de Clive William, un hermoso bebé que adoptaron como pareja hace dos meses.
Desde entonces, están paríos. Todo lo que hacen y planifican gira en torno al pequeñín que fue adoptado en San Diego, California, jurisdicción de EE.UU. donde es legal este procedimiento entre parejas del mismo sexo que estén casados o reconocidos ante la ley como domestic partnerships. Este último término –el que aplica en el caso de los incipientes padres– les permite a parejas que conviven tener derechos como los que se adquieren bajo el matrimonio.
En entrevista telefónica con Primera Hora, Adrián –actor profesional que labora también en mercadeo– explicó que la idea de convertirse en padres fue contemplada durante un tiempo y concretada en el 2012 cuando los llamaron para notificarles que había una mujer embarazada que “valientemente” había decidido dar a su bebé en adopción. La misma se dio de forma privada.
“Nosotros fuimos escogidos por la madre, quien tenía cinco meses. Tuvimos acercamiento con ella para apoyarla emocionalmente, cuidarla y mostrarle agradecimiento por el hermoso regalo de vida que nos hacía. Luego, estuvimos en la cesárea y el bebé fue entregado a nosotros directamente desde la barriga. David cortó el cordón y Clive no ha pasado un minuto separado de nosotros desde ese momento”, relató con emoción Adrián, quien es oriundo de Barranquitas.
“Nosotros somos una familia de padres que le da un derroche de amor a su hijo, como cualquier pareja heterosexual... por eso fue chocante cuando supimos la decisión del Tribunal Supremo. Pero, a la vez pienso que todo lo que está pasando es parte del miedo que sienten muchos porque saben que es solo cuestión de tiempo que se reconozcan los derechos civiles que tenemos los gays... es algo que pasará pronto a nivel nacional y federal”, dijo confiado.
Ruth e Ingrid Valmes: Otra familia no tradicional
Son una familia hermosa compuesta por dos mamás y tres pequeñines que nacieron para llenar de alegría el hogar de las esposas Ingrid Valmes y Ruth Pérez, dos boricuas que vivieron el sueño de convertirse en madres lejos de su Isla.
Ilyannie, Sebastian y Alexander Valmes-Pérez, de cuatro años, tres años y cuatro meses, respectivamente, nacieron a través de inseminación artificial, en California, jurisdicción de Estados Unidos donde está reconocida la figura jurídica de lo que en inglés se conoce como el second parent adoption, el cual le permite a una persona del mismo sexo del padre o la madre biológica adoptar. La niña fue parida por Ruth y los varoncitos por Ingrid. Todos fueron concebidos con el esperma del mismo donante.
“Lamentablemente, en Puerto Rico es bastante triste lo que está pasando con los derechos de los homosexuales... cada vez van más para atrás. Aquí en California es diferente y le doy gracias a Dios que mis hijos se están criando en un ambiente sin discrimen”, cuenta Ingrid, quien es ingeniera de profesión, mientras su esposa Ruth labora en un casino.
Como parte de una crianza saludable, han comenzado a hablarles a Ilyannie y Sebastian sobre las familias diversas.
“La nena preguntó por su papá. Sabíamos que pasaría. Y le dijimos que 'mami' (Ruth) y 'mamita' (yo) deseamos mucho tenerla y fuimos al doctor y nos ayudó a tenerla a ella y sus hermanos por algo que se llama inseminación artificial. Le dijimos que hay otros niños como ella que tienen dos mamás, como hay otros que tienen dos papás, o solo una abuelita. A lo mejor no entiende todo el concepto, pero la hemos ido familiarizando y está tranquila. Es que nosotros somos una familia como cualquier otra y llegamos a la casa como cualquier mamá, a hacer asignaciones, cocinar y jugar con nuestros hijos”, expresó Ingrid.