A nuestros lectores
Primera Hora se expresa sobre la salida de la tirilla cómica de Pepito.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 7 años.
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El pasado miércoles la dirección del periódico Primera Hora decidió no continuar publicando la tirilla de Pepito, del caricaturista Harold Jessurun. La razón para tomar dicha decisión se basó en diferencias de criterio editorial. De ningún modo tuvo que ver con presiones políticas, como se ha querido hacer ver. En Primera Hora asumimos la responsabilidad de publicar erróneamente dicha tirilla, tomamos medidas internas para robustecer nuestros controles editoriales y ofrecimos una disculpa pública.
Lamentablemente, el señor Jessurun ha decidido tomar ventaja de la situación, valiéndose de expresiones falsas. Si hasta ahora nos mantuvimos al margen de la controversia fue porque, precisamente, respetamos la libertad de expresión, así como una deferencia con el caricaturista, quien fue nuestro colaborador por espacio de 10 años.
No es cierto que al momento de terminar la relación contractual se haya aludido a presiones políticas, simplemente porque no las tuvimos y porque no son un factor que tomemos en consideración. Sí se habló del contenido ofensivo de la tirilla -independientemente del objetivo de la misma-, así como del impacto negativo que tenía para la marca. Esa es la verdad y el señor Jessurun lo sabe. Levantar la bandera de la censura apoyándose en una mentira es un golpe bajo para todos los que realmente estamos comprometidos con la libertad de expresión.
Primera Hora ha sido un diario irreverente, pícaro y, a veces, atrevido, pero el insulto y la mofa hiriente no tienen cabida en nuestras páginas. De nuestra parte, reiteramos nuestro compromiso de seguir protegiendo la integridad de todo ser humano, denunciando y combatiendo la violencia de género, el maltrato infantil, el maltrato contra los animales y promoviendo los derechos de la comunidad LGBTT, y de continuar fiscalizando a los gobiernos de todos los colores. A Pepito le deseamos éxito, que no deje de ser un niño travieso pero que siempre diga la verdad y que no fomente la violencia de ninguna forma, porque de eso ya tenemos mucho. ¡Adelante!