¿Qué candidato a la Gobernación viene de los barrios? ¿Cuál de ellos trabaja en las fábricas? ¿Hay un verdadero representante del trabajador, de la mujer y del pobre? ¿Alguno se atreverá a demoler Paseo Caribe? ¿Cuál es ese candidato tan ansiado?

La respuesta es... Ninguno.

Ninguno, un personaje creado por el joven, pero brillante grupo de teatro político Papel Machete, hace los mismos, trillados ademanes de los políticos tradicionales: acaricia niños, señala y saluda a desconocidos, se golpea a sí mismo en el pecho y llega con un séquito que carga pancartas que rezan, por ejemplo: “Todos prometen; Ninguno Cumple”.

El juego de palabras en la actividad de ayer, celebrada en el residencial Manuel A. Pérez, no cesó: “Ninguno conoce tu situación”, “Ninguno trabaja en la fábrica como tú”, “Ninguno favorece la libertad de los prisioneros políticos”, “Ninguno respeta a los periodistas”.

Otro de los personajes del grupo de teatro, un “cangrejero de toda la vida” que simpatizaba con el “nuevo candidato”, dijo que lo endosaba porque “Ninguno estuvo junto a mí desde el principio al final cuando me expropiaron de Santurce. Ninguno enfrentó a todos los 'colmillús'. Por eso, yo voy a votar por Ninguno”.

“Yo sé que Ninguno se quedará con los sueldos actuales y no se aumentará los privilegios”, dijo otro de los personajes, que al igual que el resto llevaba una máscara construida de papel maché.

Más que una protesta de inconformidad, lo que hizo ayer Papel Machete fue una cátedra de lo mejor del teatro político del país y del poder que tiene esa plataforma para convencer o, más importante aún, para provocar que el ciudadano piense en un país en que eso parece estar fuera de moda.

Y, como en política, la manifestación hilvanó lo absurdo con lo serio. La propuesta de Papel Machete no es sólo poner en ridículo a los políticos tradicionales -sus ademanes y sus discursos parecían un calco de una actividad del Partido Popular Democrático o del Partido Nuevo Progresista- sino que también incluye una movilización para que los electores escriban la palabra 'Ninguno' en la quinta columna del write-in, la misma que los impulsores del ex gobernador Pedro Rosselló usarán para enviar su mensaje.

La manifestación fue una muestra del descontento de un sector joven de la población no sólo con los candidatos actuales, sino con todo el sistema electoral y gubernamental.

“Hacemos un llamado a que se haga un boicot electoral. Pero que se participe porque queremos hacer constar el boicot. Las elecciones no resuelven nada”, dijo Dora Irizarry, miembro del grupo y una de las organizadoras del performance.

“Ninguno los quiere”, “Ninguno los respeta”, clamaban los presentes cuando el personaje del candidato estaba frente a la multitud, mientras su “portavoz” hablaba.

En su comunicado, Papel Machete explicó que los favorecedores de Ninguno son los ciudadanos que no votan por considerar las elecciones de carácter colonial y aquellos que no se sienten representados con las opciones actuales.

“No nos quedamos callaos y entendemos la necesidad de protestar, y en estas elecciones proponemos una abstención que se pueda contabilizar en las urnas”, dice el comunicado.

La razón para pensar así, según explica la propaganda, es que “en nuestro país, los partidos políticos trabajan dentro de un marco de imposición, haciendo de la participación electoral un acto de selección entre candidatos que al momento de salir electos se convierten automáticamente en marionetas de los ricos”.