Más de 200 personas marcharon desde el Tribunal Federal hasta la placita Roosevelt en contra de la multinacional Monsanto y otras compañías, como  Bayer CropScience, DuPont Pioneer, Syngenta, Illinois Crop Improvement, Dow AgroSciences, AgReliant Genetics, y la Asociación de Biotecnología Agrícola de Puerto Rico (PRABIA), por el uso de glifosato (el ingrediente activo del pesticida RoundUp) y otros químicos en las semillas de cultivo y que terminan en la cadena alimenticia de los puertorriqueños. 

La actividad fue dedicada en conmemoración a Carmelo Ruiz Marrero, quien dedicó gran parte de su vida a educar, investigar, y escribir sobre los peligros de los transgénicos.

Relacionadas

Hombres, mujeres y niños marcharon primero hasta el edificio Seaborne  (donde se encuentran las oficinas de la Junta de Supervisión Fiscal) reclamando que la directora del organismo federal, Natalie Jaresko, fue la que le dio paso a Monsanto en Ucrania y ahora quiere hacer lo mismo en Puerto Rico. 

Asimismo, los organizadores alejaron que a las multinacionales les han dado más de $530 millones en incentivos para el cultivo de transgénicos mientras la economía está en quiebra. 

Finalmente, dos horas y media después de haberse convocado la marcha, llegaron a la placita Roosevelt, donde hay un mercado agroecológico dos veces al mes. 

Por su parte, la empresa Monsanto envió declaraciones escritas en reacción a la actividad. en las que se expresan disponibles para un diálogo sobre la agricultura moderna ayudan a los agricultores del mundo a cultivar alimentos utilizando menos recursos naturales de la Tierra.

También aseguraron que décadas de estudio al glifosfato apuntan a que se puede utilizar de forma segura.

"Como consumidores, las personas que trabajamos en Monsanto nos preocupamos mucho por la calidad y seguridad de los alimentos que comemos, y estamos comprometidos con el desarrollo de productos que contribuyen a la elección de alimentos inocuos y nutritivos", indicó la empresa, que reclama dar trabajo a sobre 20,000 personas.