La exprimera dama de los Estados Unidos, Laura Bush, se expresó en contra de la política que separa a niños de sus padres inmigrantes impulsada por el presidente Donald Trump y su gobierno.

Bush expresó su desacuerdo en una columna escrita para el Washington Post.

"Vivo en un estado fronterizo. Aprecio la necesidad de hacer cumplir y proteger nuestras fronteras internacionales, pero esta política de cero tolerancia es cruel. Es inmoral. Y me rompe el corazón", escribió el pasado domingo.

La esposa del presidente George W. Bush lo comparó con los campos de internamiento de japoneses-estadounidenses durante la Segunda Guerra Mundial, que llamó "uno de los episodios más vergonzosos en la historia de Estados Unidos".

Asimismo, otros funcionarios republicanos se han expresado en contra de las medidas impuestas.

El exasesor de Trump, Anthony Scaramucci, dijo que la política podría ser peligrosa para el primer mandatario y que debería tomar las medidas necesarias para solucionar el problema.

“El presidente se va a hacer daño con este problema si permanece por mucho tiempo”, manifestó Saramucci.

Cerca de 2,000 niños han sido separados de sus familias en seis semanas en abril y mayo luego de que el fiscal general, Jefferson Sessions, anunció una política de zero tolerancia que refiere todos los casos de inmigración ilegal a enjuiciamiento criminal. El protocolo de los Estados Unidos prohíbe detener a los niños con sus padres ya que ellos no son acusados de un delito.