Mientras el huracán Jerry pasa al norte de Puerto Rico provocando mares picados y poca lluvia, todos los ojos están puestos en una onda tropical con mediano potencial de desarrollo ciclónico que podría afectar a la Isla entre la noche del lunes y el martes.

El Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) precisó en su informe de las 8:00 a.m. que el sistema tiene 50% en convertirse en un ciclón en las próximas 48 horas y 60% en los próximos cinco días.

De no lograr una formación ciclónica, el sistema nombrado 99L pasaría sobre Puerto Rico entre el lunes en la noche a martes como una baja presión, explicó el meteorólogo Walter Snell, del Servicio Nacional de Meteorología (SNM) en San Juan.

Si se convierte en una depresión, una tormenta o huracán, la trayectoria podría cambiar. Sin embargo, hay que destacar que la Isla se encuentra en el cono de incertidumbre del sistema proyectado por el NHC.

“Están esperando a ver si desarrolla a depresión o ciclón y todavía es muy incierto”, dijo Snell, al detallar que la lluvia que genere este sistema puede ser “significativa”.

Según el informe oficial, “una onda tropical se encuentra a varias cientos de millas al este de las Islas de Sotavento y produce un área de aguaceros y tronadas. La onda se mueve rápidamente desde el oeste hacia el oeste noroeste entre 15 a 20 millas por hora por el próximo día o dos, cruzando las islas para el domingo”.

“Aunque el sistema luce desorganizado, condiciones ambientales son favorables para un desarrollo de una depresión tropical más tarde este fin de semana o a principios de la semana próxima. Independientemente del desarrollo, mucha lluvia se espera para las Antillas Menores. Estas islas y Puerto Rico deben monitorear este disturbio”, añade el informe.

De convertirse en una tormenta tropical o huracán, el sistema se llamaría Karen. 

Por otro lado, el huracán Jerry, que tiene vientos de 65 millas por hora, se encuentra a 250 millas náuticas nornoreste de San Juan, lo que ocasiona mares picados y aguaceros dispersos sobre la Isla, informó el meteorólogo.

“Pasó con el lado menos fuerte hacia nosotros”, explicó el experto, al exponer las razones por las que el sistema no dejará tanta lluvia sobre Puerto Rico.

A las 5:00 a.m., el sistema se encontraba en la latitud 21.4 grados norte y la longitud 64.0 grados oeste. Se mueve al noroeste a 15 millas por hora.  

Lo que Jerry provoca son condiciones marítimas peligrosas para operadores de pequeñas embarcaciones y bañistas a lo largo de la costa norte y los pasajes de Mona y Anegada.

Se registra una marejada entre dos a cuatro pies, con oleaje que pudiera romper en la costa hasta a una altura de 16 pies.

Debido a esta situación, se ha emitido una advertencia de inundaciones costeras hasta las 6 p.m. de este sábado, una advertencia de resaca fuerte hasta las 6 a.m. de mañana, domingo, y un riesgo alto de corrientes submarinas hasta mañana en la tarde.

“Es bastante peligroso para que la gente que aventuren al mar”, precisó.