Las artes se visten de luto con el fallecimiento del maestro Rafael Rivera Ortiz, quien falleció el pasado miércoles 22 de julio en el Hospital Metropolitano de San Juan, luego de un largo tratamiento por cáncer.

“La partida del maestro Rafael Rivera Ortiz representa una gran pérdida para el campo de las artes. Sin embargo, hoy, celebramos su hermosa obra, que contribuye a enriquecer el acervo cultural de Puerto Rico.

Celebramos sus enseñanzas y el valioso legado que nos dejó al ayudar a encaminar por el mundo de las artes a varios miles de estudiantes que tuvieron el privilegio de ser sus alumnos...

Celebremos por siempre la vida y obra de un gran puertorriqueño que dejó profundas huellas en su paso por nuestra universidad. Descanse en paz”, indicó Carlos Rosado, director de la División de Educación Continua y Estudios Profesionales (Decep).

Ivonne Hurley, directora de la Galería 778 y amiga personal de Rivera, recordó una reciente exposición en la que varios artistas donaron obras para que fueran subastadas a beneficio del tratamiento del pintor.

“Muchos artistas colaboraron, pero lamentablemente no se vendieron muchas obras... de todas formas, él estaba bien contento de estar exhibiendo”, recalca.

De acuerdo con la galerista, la obra de Rivera se puede resumir con las palabras que el propio artista le dictó recientemente: “El pintor, como el grabador o el arquitecto y el escultor, se enfrenta siempre al conflicto existente entre lo que sabe y lo que siente, lo que conoce y lo que intuye, pero por supuesto es todo aquello relativo a la sensibilidad y a los sentimientos lo que siempre prevalece”.

Rivera, nacido en Arecibo pero criado en Manatí, fue discípulo de Lorenzo Homar y profesor en el Taller de Bellos Oficios de la Decep en la UPR, Recinto de Río Piedras, desde 1992. Su labor docente incluye la Academia de San Carlos, la Liga de Estudiantes de Arte de San Juan, la Escuela de Artes Plásticas y la UPR.

El artista expuso su obra en museos y galerías y, tan recientemente como ayer, inauguró una nueva exposición con varias de sus obras en la Galería 778, ubicada en la avenida San Patricio. En su trabajo exploró temas de la literatura, la mitología, la religión y las costumbres.

En homenaje a su vida, el Recinto de Río Piedras continúa los preparativos para una exposición conmemorativa de su obra. La exposición, organizada por  un grupo de discípulos, amigos y compañeros del artista,  se inaugurará el jueves 17 de septiembre en la Sala Francisco Oller de la Facultad de Humanidades, a las 6:00 p.m.

Al pintor le sobreviven su padre Rafael y su hermano Roberto.