José Rivera: un artista del saque directo
Los servicios del esquina José Rivera, de los Gigantes de Carolina, continúan siendo un dolor de cabeza para sus rivales.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 11 años.
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¡301 saques directos, y contando!
El zurdo nacional José Rivera añadió su nombre en el archivo histórico de la Liga de Voleibol Superior Masculino (LVSM) al convertirse, el pasado domingo, en el primer jugador en la historia moderna del torneo nacional en alcanzar y rebasar los 300 servicios directos, y el estelar pasador se mostró orgulloso de la gesta.
“Me tuve que reír durante el juego porque sabía que la fanaticada ya llevaba varios juegos esperando ese servicio directo porque estaba en 299, pero cuando lo logré me sentí muy orgulloso de lo que he hecho durante mi carrera y en ese aspecto de los saques”, indicó Rivera a Primera Hora.
Rivera, natural de Chicago, Illinois, debutó en la LVSM en el 2000 con los desaparecidos Rebeldes de Moca, con quienes ganó su primer campeonato como novato. Desde entonces ha pasado por las filas de los Playeros de San Juan, los antiguos Caribes de San Sebastián y, ahora, los Gigantes de Carolina.
Y entre medio de sus participaciones en Puerto Rico se convirtió en uno de los pasadores más solicitados y experimentados en el voleibol internacional al contar con vasta experiencia en ligas europeas como las de Italia, Grecia, Alemania, Polonia, Bélgica y Francia.
Además de su fina recepción y fuerte pegada en el ataque, Rivera posee un cañón en el servicio, pero no solamente saca con fuerza, sino que puede enviar el balón a cualquier parte de la cancha y confundir a los receptores con cambios de velocidad.
“Mi servicio comenzó desde pequeño, pues jugaba mucho voleibol playero en Chicago con mi padres y familiares. El servicio en el voleibol playero es bien importante porque es ventajoso tener un saque fuerte, y también es muy importante en la sala”, dijo Rivera.
“Para mí es un logro importante y algo especial. Y lo más importante fue que ganamos el partido. Voy a seguir jugando, pues entiendo que todavía me queda un poquito más de voleibol, para ver si puedo lograr los 400 aces”, añadió el veterano rematador.