No es secreto que Argentina consiguió su pase a Río de Janeiro 2016 a base de tesón, contra viento y marea, con un equipo en plena renovación y sin muchas de las luminarias que han vestido su uniforme en los pasados años.

Sin embargo, el dirigente Sergio Hernández no descartó que algunas de esas estrellas que no estuvieron en este Preolímpico sí vuelvan a decir presente para las Olimpiadas del 2016 ahora que este grupo aseguró su boleto tras vencer a México el viernes en la noche en semifinales.

“Hay jugadores que muchos conocen que están activos, algunos que están lesionados y recuperándose como Carlos Delfino y que no pudieron estar aquí”, dijo Hernández.

“También hay otros activos. Manu Ginóbili es un jugador que hoy (viernes) estuvo presente (en México) y está activo (en la NBA). Pablo Prigioni es un jugador que también está en la NBA. Walter Hermann es otro ex NBA que ahora está jugando en Argentina. Y muchos otros que han jugado torneos internacionales que podrían haber estado acá, como Paolo Quinteros, Leo Gutiérrez, Martín Leyva. Podría nombrar varios más. Otros lesionados que no pudieron venir como Marcos Matta y Federico Aguerre. Todos podrían sumarse”.

Todo eso luce como una tentadora posibilidad y, ciertamente, ayudaría a fortalecer a la plantilla actual en búsqueda de otra presea olímpica, la cual los eludió en el 2012 cuando perdieron por el bronce ante Rusia, pero que había logrado previamente en el 2004 con un oro en Atenas y en el 2008 con un bronce en Pekín.

No obstante, Hernández dijo que la única condición es que el equipo que eventualmente vaya a Río vaya con la misma unidad y compromiso que fue este quinteto que dio la cara en México.

“Siempre lo importante es que los 12 que tenés en ese momento jueguen como un puño, como lo hicieron estos jugadores”, dijo Hernández, quien estuvo al mando del equipo de bronce del 2008.

“Ojalá que el próximo equipo, conformado como esté conformado, juegue con la misma actitud y la mima concentración que lo hicieron los de aquí”.