Cuando anunciaron a Miss Mundo en Puerto Rico, fuimos muchos los que vimos la alegría de Stephanie del Valle, la ex Miss Mundo boricua, al hacer el anuncio. Para ella y su familia era un sueño cumplido. En ese momento, todo era peaches and cream. Hay que recordar que Stephanie es la Miss Mundo que más dinero consiguió para las obras de caridad de la organización. Se suman por millones.

Volviendo al anuncio, Wilnelia Merced hasta bailó plena. Para Brad Dean, del DMO, todo era fiesta. La cantidad de promoción que tendría Puerto Rico superaría lo que recibimos en los certámenes de Miss Universe, cuando ganó Denise Quiñones en Bayamón y la rusa Oxana Fedorova en San Juan.

Pero ayer, a horas del certamen, Mr. Covid nos quitó el baile y, lo que algunos dirían, la contentura. Primero porque no venderemos a Puerto Rico al mundo antes de Navidad, cero promoción, y luego por dar la impresión, o la realidad, que en Israel fueron más cuidadosos con Miss Universe que aquí evitando el contagio.

Las imágenes de Israel en el Miss Universe no reflejaban a chicas compartiendo con otras personas; acá vimos a la chicas sin mascarillas hasta en la visita al gobernador.

La impresión que dejamos con la cancelación, y lo entiendo, es que querámoslo o no, seguimos siendo un país que por más gente que tengamos vacunadas, no se puede cantar victoria. Me comentaron que varios infectados con COVID- 19 eran personal de la producción que vinieron desde Inglaterra, y eso sí que no pudieron superarlo.

Es una pena que TeleOnce no pudo entrar con el pie derecho a los certámenes de belleza y sé que muchos de sus empleados andaban con el alma en pena al conocer la noticia. Pero, such is life. No quiero ni pensar la cantidad de dinero que perdieron. Y la cantidad de dinero que invirtió y perdió Turismo y el gobierno ni se diga.

No sé si hicimos un favor o nos tiramos la soga al cuello con el turismo de Navidad. Lo que sí sé es que pasaremos a la historia como el primer lugar que quiso ser el centro del mundo, pero nos quedamos en eso: en querer ser. Hello, gracias.

Miss Universe 360 grados

Hacía tiempo que Miss Universe buscaba un socio que botara la casa por la ventana y lo encontró en Israel. La escenografía espectacular, las tomas de Haifa, Tel Avid, Jerusalén, Nazareth, Jaiffa, por supuesto el lugar sede Eilat, fueron espectaculares. Le sacaron partido a las tomas y muy buena producción y promoción.

Sobre el recuento de los años anteriores por el aniversario, creo que aparte de la venezolana Irene Saez Conde, que fue alcaldesa, como que pasaron sin pena ni gloria. Pocas venezolanas y menos boricuas.

Al comenzar, Steve Harvey tiró un monólogo de casi 17 minutos y, si no lo aguantas, cambiaste de canal y te perdiste el resto. Muy mal sus comentarios sobre las horas que tuvo que viajar en helicóptero; todavía estoy buscando el chiste. A él no le importó criticar a sus anfitriones.

Queríamos ver a las candidatas y él seguía hablando. El chiste de mal gusto sobre la televisión en blanco y negro en casa de sus padres, nos recuerda Black Lives Matters, y parece que a él no.

Las semifinalistas no fueron sorpresa, ni tampoco la batalla final entre Paraguay, Nadia Ferreira, e India, Harnaaz Sandhu, la ganadora. Las preguntas eran casi lo que ellas habían dicho en los videos previos, incluyendo la ganadora. Eso fue repetitivo y no hubo sorpresas.

Y nos vamos con Puerto Rico. Michelle Marie Colón no debió usar un traje típico que la tapara tanto. Estamos cometiendo ese error casi todo el tiempo. Tú quieres ver cómo luce la chica, no si en Puerto Rico hay flores, bombas o lo que sea.

Respecto al traje de noche, cuando la presentaron los comentarios parecían más una promoción a los diseños de Israel que a Miss Puerto Rico. Si lo hicieron para ganarse a los israelitas… como que no. El color del traje, al igual que pasó con Madison Anderson, no la resaltó en ningún momento.

Uno no quiere ver espejos o piedras, queríamos ver a Michelle regia, en un traje que le aumentara su belleza y no le quitara. Quien le recomendó que usara ese traje… parece su enemigo. Sorry, malet mallet.

Y nuevamente la representante de South Africa hace tremenda demostración. Ahora el equipo que entrena a esas chicas es súper querido por la organización. Hemos visto recientemente dos Miss Universe y dos finalistas. Algo tienen que lo están haciendo bien.

Puerto Rico no lució mal, pero si hubiese tenido otro traje y otro traje de baño creo que llegaba al cuadro final y allí sí que bailaba… BOMBA. Hello, gracias.