A la verdad que hay cosas que uno no entiende.

La gente te pregunta en la calle qué pasa con la Corte Federal y Raphy Pina. Cada vez que Pina tiene una celebración solicita a la Corte Federal permiso para salir. Supuestamente los federales son estrictos, pero le dan permiso para salir y estar en una fiesta. Es raro, raro pues en el Tribunal Estatal para darte un permiso, inclusive para la muerte de tu madre, es bien cuesta arriba. Así que Pina, dentro de todo, no se puede quejar; está bendecido, lo han tratado como el “Barón del Reguetón”. Hello, gracias.

¿Va o no va?

Cuando el entonces alcalde de Guaynabo, Héctor O’Neill, anunció que quería crear el Museo de la Música, pensé que era una gran idea, pues Puerto Rico es muy musical.

Todo arrancó viento en popa y muchísimos artistas dieron su ropa, trofeos, memorabilia importante para perpetuar su legado en un lugar donde el público pudiera verlo.

Con la salida de Héctor O’Neill, el alcalde Ángel Pérez explicó que ese museo era un nati muerto, ni había dinero para concluir la construcción ni para mantenerlo, que supuestamente eran como 3 millones y la proyecciones de visitas no llegaba ni a un millón.

Llamaron a los artistas y les devolvieron sus pertenencias. Sé que una cantante, que de hecho vive en Guaynabo, estaba prendida, pues supuestamente sus pertenencias estaban llenas de moho.

Así que Rafael Ithier, que no le gustan los bochinches, no quiere que el museo tenga su nombre.

El nuevo alcalde Edward O’Neill, hijo de Héctor, ha dicho que volverá a montar el museo, aunque a muchos de los guaynabitos no les interese. Por ahora ha sido debut y despedida. Uno de los errores que han cometido los tres alcaldes es no haber hecho un estudio de necesidad. Recordamos que el Museo del Auto también era un nati muerto y los autos que estaban allí y sus flamantes dueños.

Nelly no lo contará

La celebración de Mayo Mes de la Radio ha vuelto a pasar lenta y todo por la pandemia. Pocas son las radioemisoras que están promocionando la celebración.

En el caso de WKAQ AM han hecho unas cápsulas históricas buenas en la voz del ponceño Herminio Quintana, que estuvo mucho tiempo en dicha radioemisora. El ponceño es una de las mejores voces de Puerto Rico. Pero lo que a muchos de nosotros nos asombró fue la despedida de la periodista Nelly Rivera. Nelly siempre muy profesional se despidió agradeciendo a todos, pero como es ella ni un party de hasta luego.

Conozco a Nelly desde que estudiaba en México. Ella junto a Efrén Arroyo (q.e.p.d.) eran mis compañeros de reportajes desde la capital azteca. Luego la conocí personalmente y durante años coincidimos en cientos de actividades y conferencias de prensa de artistas. A Nelly nuestros respetos por una labor bien hecha y lamentaremos la salida de WKAQ con “Nelly te lo cuenta”. Ahora se dedicará a su familia, la cual por mucho tiempo sufrió los embates de esta profesión, que muchos dicen que es de glamur por entrevistar artistas, pero otros nos llaman aguantonas por el “peaches and cream” que hay que soportar a otros. Éxito, Nelly, y te vamos a extrañar.