Gracias a las aerolíneas de bajo costo, el transporte aéreo es un medio que se hizo asequible para una gran mayoría de personas que quieren acortar sus tiempos de viaje de un lugar a otro.

Aunque el avión es el medio de transporte más seguro del mundo –con una tasa de un accidente por cada 1.26 millones de vuelos, según la IATA-, hay quienes todavía les temen a las alturas.

Si ese es su caso y cada vez que se monta a un avión cree que puede pasar algo y prefiere “prevenir que curar”, hay estudios sobre las sillas más seguras en una aeronave en caso de accidente.

Un estudio publicado en la revista Popular Mechanics, con base en los accidentes aéreos en 1971 en Estados Unidos, se dio a la tarea de encontrar cuáles eran los mejores puestos para sentarse en caso de cualquier eventualidad en el vuelo.

La investigación arrojó que los que tienen más probabilidades de sobrevivir a un siniestro son los pasajeros que están sentados en la parte trasera del avión en un 69 %, seguidos de los que están ubicados antes o después de las alas (56 %).

Los que tienen menos probabilidades de sobrevivir son los tripulantes de la parte delantera, que solo tienen un 49 % de salir con vida en caso de accidente.

Tenga en cuenta que, ante cualquier tipo de emergencia aérea, las principales recomendaciones son poner el respaldo de la silla en posición vertical, abrir la ventana, asegurar el cinturón de seguridad y usar la mascarilla de oxígeno cuando dé lugar.

Estas recomendaciones se hacen para preservar la vida de los pasajeros. Por ejemplo, la silla vertical ante un impacto reduce los efectos de un impacto en la columna y el cuello; el cinturón le permite permanecer asegurado en su puesto en cambios de velocidad y altitud.