El deshacerse de los tabús sobre el sexo puede salvar vidas y garantizar una vida larga, plena y saludable.

Así lo aseguraron esta mañana representantes de las organizaciones sin fines de lucro HealthProMed, AARP Puerto Rico y el Puerto Rico Community Network for Clinical Services, Research and Health Advancement (PR CONCRA), quienes aunaron esfuerzos para educar, específicamente a la población mayor, sobre la prevención de transmisión del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y otras enfermedades sexuales.

“Tenemos que derrotar el mito de que la vida sexual se acaba una vez se pasan los 45, 50 años. Esto no es así. La sexualidad es una parte natural de nuestra vida y tenemos que atenderla de manera responsable, con información confiable y dirigida por equipos profesionales expertos en estas áreas”, instó en conferencia de prensa la licenciada Ivonne Rivera, directora ejecutiva de HealthProMed desde la sede de la organización sin fines de lucro, en Santurce.

La población de adultos mayores con VIH o que están expuestos a enfermedades sexuales normalmente tienen otras afecciones de salud crónicas, empeorando aún más su cuadro clínico.

Es por esto que, además de medicamentos preventivos, también se enfatizó el uso de profiláctico para toda persona que está activa sexualmente, independientemente si está en edad de gestar, ya que sirve como protección contra la proliferación de estos contagios.

“Este tipo de iniciativas mejora la calidad de vida y extiende la expectativa de vida de la población mayor de Puerto Rico. El mito grande, el elefante sobre la mesa, es la sexualidad del individuo como adulto mayor y eso hemos visto cómo se ha ido extendiendo con medicamentos, etcétera y las prácticas, como la gente está viviendo más a plenitud su vida sexual, no importa la edad. Sabemos que la gran población que vive con (VIH) es la población de 55 años más y eso se está extendiendo. Así que, es importante tener educación, llegar a todas las áreas para que la gente que está activa sexualmente se cuide”, manifestó José Acarón, representante de AARP Puerto Rico.

“Somos organizaciones que trabajamos bajo 0 estigma”, puntualizó Rivera.

El plan

Las entidades no gubernamentales lanzarán, a partir del viernes, 18 de octubre, un “plan de acción integral”, impactando primeramente a San Juan, Vieques y Culebra, por considerarse las áreas “más vulnerables” de contagio a este tipo de infecciones.

Se priorizará a las islas municipios por la dificultad de servicios que suelen sufrir los residentes de estos pueblos. En el caso de San Juan, se le dará prioridad por el alto número de contagios que ha tenido históricamente.

“Es importante que unamos esfuerzos. Esta batalla no la podemos hacer solos. Tenemos que unirnos”, comentó el licenciado Carlos Cabrera, director ejecutivo de PR CONCRA, entidad que tiene 1,300 pacientes con VIH, de los cuales el 50% son mayores de 50 años.

Rivera arguyó a Primera Hora que el plan se ejecutará a través de los departamentos de las organizaciones de “Community Outreach and Enrollment”, que “no es otra cosa que relaciones con la comunidad para ir y buscar a esa población…educarla y traerla a nuestras puertas”. También, HealthProMed establecerá clínicas móviles en San Juan, Carolina, Guaynabo, Cataño. Vieques y Culebra para ofrecer pruebas de detección temprana, apoyo en consejería y seguimiento.

“Que entiendan que esto es un acceso a servicio de salud primaria”, detalló a preguntas de este diario.

Rivera indicó, además, que las entidades continuamente llevan a cabo actividades comunitarias dirigidas a educar sobre VIH y prevención. También, se suministran pruebas rápidas para detectar infecciones a través de estas iniciativas, lo que se sigue con pruebas confirmatorias en las organizaciones.

“El plan está estructurado de forma tal que se hace el alcance, si la persona sale positiva, nosotros podemos iniciar inmediatamente los tratamientos, lo que se llama ‘rapid access’. Muchos años atrás había que esperar, hacer un montón de pruebas, cargas virales, pero eso ha cambiado. Se inicia tratamiento inmediatamente, se le asigna un navegador par que va navegando con esa persona a través de todo el proceso. La persona no está sola. La persona va de la mano con ese navegador que lo va conduciendo hacia cada uno de los servicios que se les va a estar dando, todos los servicios de apoyo, la parte clínica, emocional y biopsicosocial completa”, apuntó a este medio Cabrera.

Pese a que la primera fase de la iniciativa se concentrará en San Juan, auguran expandir el proyecto a diferentes partes de la Isla.

Por otra parte, en la página web de HealthProMed, así como en las redes sociales, se compartirán vídeos cortos educativos sobre la prevención y el tratamiento de personas contagiadas. Las cápsulas humanizan al medicamento contra el VIH profilaxis preexposición (PrEP), presentándolo a través de una animación digital de un médico, llamado Dr. PrEP.

“Vamos a estar viendo una campaña de servicio público que queremos que se proyecten los vídeos educativos de Dr. PrEP… (para comenzar) esa conexión con esa población que puede estar a riesgo que sepa que en Puerto Rico CONCRA hay un Dr. PrEP, en HealthProMed hay un Dr. PrEP y en otros centros 330 hay Dr. PrEP, que los vamos a recibir, lo vamos a llevar y que los vamos a llevar a que viva una vida segura. Es una responsabilidad de todos”, sostuvo Rivera.

El director médico de HealthProMed, el doctor Héctor Villanueva, explicó que PrEP es un medicamento “seguro y efectivo”, que previene el VIH, por lo que es efectiva para personas no contagiadas, pero que podrían estar a riesgo de contagio.

“Muchas veces la gente tiende a recurrir a doctor Google o las redes sociales buscando soluciones y eso no es correcto. Deben visitar a (su) proveedor (médico), deben de participar de estas actividades para ellos. Nosotros tenemos un lema y es que ‘te queremos saludable’ y es el lema que llevamos siempre a dondequiera que vamos”, agregó Cabrera.

Rivera aseguró que la iniciativa no depende del gobierno y nació puramente de las entidades. Dijo que decidieron no esperar ni “depender de recursos externos, tanto en términos financieros, en términos profesionales” para impactar a la población necesitada.

“No necesariamente dependemos o vamos a esperar para actuar en pro de la salud comunitaria”, subrayó.

“El gobierno no lo puede hacer todo. Tenemos que reconocer eso. Así que, nosotros estamos aquí para dar esa mano amiga y trabajar en colaboración, porque los casos positivos tenemos que reportarlos al gobierno”, añadió Cabrera.

Los números

Acorde a datos del Programa de Vigilancia VIH/SIDA de la Oficina de Epidemiología e Investigación del Departamento de Salud hasta el 30 de septiembre, unas 4,170 personas viven con VIH en San Juan, mientras que 2,126 en la región de salud catalogada como “Metro”, que incluye a Canóvanas, Carolina, Guaynabo, Loíza, San Juan y Trujillo Alto.

En la región de salud de Fajardo, que incluye a Vieques y Culebra además de Ceiba, Fajardo, Luquillo y Río Grande, se contabilizaron 590 casos.

El total de adultos y adolescentes contagiados en todo Puerto Rico, desde el 1980 al 30 de septiembre, sumó a 51,561 contagios, cifra que incluye infecciones de VIH sin SIDA (12,304), SIDA inmunológico (13,622) y los restantes diagnósticos de SIDA (25,635).

Mientras, la cifra de contagios en menores de 13 años llegó a 693: 134 infecciones de VIH sin SIDA, 96 de SIDA inmunológico y 463 de los restantes diagnósticos.

Los fallecimientos de aquellos diagnosticados sumaron a 31,755.

Los varones suelen liderar las estadísticas, pues de los 51,561 contagios, 39,007 corresponden a personas identificadas con este género. La razón principal de contagio para hombres adultos, según Salud, es por inyecciones de narcóticos (16,810), mientras que para las féminas ha sido contacto sexual con hombres (8,790).

En menores, la razón principal de transmisión, tanto para niños (313) como niñas (89), han sido madres con VIH o con riesgo a infecciones del virus.

El año con la mayor cantidad de diagnósticos reportados fue el 1993 (3,083), mientras que este año se ha reportado la menor cantidad desde el 1980 (208). En cuanto a las defunciones, en el 1990 murió la mayor cantidad de personas diagnosticadas (2,529) y el 2024 la menor (8).