Contemplar las estrellas y la hermosa vista al océano que promete el Monte Carmelo desde la comodidad de una cama es posible al pernoctar en El Nido Bubble Tent, de Vieques; un concepto novedoso que garantiza una experiencia de aventura y glamour mientras disfrutan del contacto seguro con la naturaleza.

Gabriela Giampietro, oriunda de la República Checa, y su esposo Mathew Giampietro, un italiano residente en Estados Unidos, son los creadores de este concepto. Ambos se definen como amantes del ambiente natural viequense por lo que, luego de varias visitas vacacionales a la Isla Nena, decidieron adquirir un terreno y construir su residencia, donde -eventualmente- designarían un espacio para el novedoso proyecto de la caseta en burbuja.

“Yo lo vi en Instagram y me gustó. Lo trajimos desde Utah y lo vi como una excelente oportunidad de alquiler”, dijo Gabriela al mencionar que la construcción en Vieques comenzó en el 2014.

El Nido Bubble Tent es un concepto para acampar con comodidades y seguridad, destacó la propietaria. La burbuja está ubicada en una amplia terraza en la parte inferior de la propiedad de la pareja. Cuenta con una cama queen, acondicionador de aire portátil y baño. En esa comodidad, el huésped podrá disfrutar de las estrellas, la hermosura de la luna, el canto de las aves y otras maravillas de la naturaleza mientras pernocta en una caseta tipo burbuja transparente.

“Es más por la experiencia de acostarte y ver las estrellas y océanos”, destacó Gabriela en entrevista telefónica.

La carpa, en forma de burbuja completamente transparente, se ha convertido en uno de los alojamientos predilectos para la celebración de ocasiones especiales como propuestas matrimoniales, aniversarios, sesiones de fotos o simplemente una experiencia de conexión con la naturaleza.

“Les encanta la experiencia de ver el cielo con claridad, la vista que tienen del mar o escuchar las aves. Los que se quedan aman esa experiencia de una sola noche. Aunque tienen un aire acondicionado, es una experiencia de una sola noche porque, aunque la cama es cómoda y el aire acondicionado es suficiente para dormir cómodo una noche, el calor se siente un poco”, dijo Gabriela.

La mayoría de las reservaciones se hacen a través de Instagram y la propiedad está disponible solo en los meses entre noviembre a marzo. “Esos son los meses en los que estamos en la propiedad. La mayoría de las personas me contactan a través de la plataforma Instagram. La de Airbnb es más por exposición. Casi siempre cuando llego a la isla, ya tengo el 80% del tiempo reservado”, compartió la mujer.

De acuerdo con Gabriela, “un 90% (de los clientes) son turistas, mayormente de Estados Unidos; mientras que el 10% son de Puerto Rico; mayormente influencers; o vienen a hacer ‘photoshooting’. Llegan, se quedan una noche y luego se van”.

La tarifa para esta experiencia es de $259 por noche e incluye estacionamiento, wifi y artículos esenciales de higiene personal, entre otros servicios. Su ubicación la hace accesible a muchos lugares de interés y a cinco minutos en vehículo del termi