A sus 12 años a Tania Pérez le dieron tres días de vida por causa de un miocardio dilatado que mantenía su corazón funcionando solo al 10 por ciento. Llevaba casi tres meses en el Centro Cardiovascular de Puerto Rico y el Caribe, en Río Piedras, en espera de un trasplante de corazón que le permitiera vivir, única alternativa viable luego que los doctores lo intentaran todo.

Pero sus padres no perdieron la fe de que el milagro ocurriría, y así fue. Gracias a la donación de órganos, hoy Tania vive para llevar el mensaje a otros de la importancia de ser parte del registro de órganos y tejidos de LifeLink.

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La condición de Tania, que la llevó a ser la primera joven trasplantada en el Cardiovascular, comenzó a los 8 años cuando le diagnosticaron que su corazón era más grande que el de un adulto.

“A mi me latía el corazón hasta el estómago. Estuve cuatro años con la condición con altas y bajas. Durante esos cuatro años experimenté como tres infartos, pero ya el último fue a los 11 años que fue el grave donde mi cuerpo no resistió y de ahí fui sometida al intensivo del cardiovascular. Tuve esperando 89 días, en esos días me fui deteriorando pero siempre estuve de buena actitud”, dijo.

“Puedo decir que en mi proceso siempre estuve con mucha fe, aunque habían días que amanecía y tenía una noticia bien fuerte del doctor de que ya no podíamos hacer más nada, ya le hemos dado todo… no aparece nada, ningún corazón. Me decían ‘ahora mismo los corazones que tenemos disponible son de gente que tuvo sida o gente que fue drogadicta y mis padres siempre firmes de que Dios iba a hacer un milagro en el momento indicado en mi vida, y ahí cuando quedaban tres días de vida, ahí aparece el corazón perfecto”, relató.

Ahora Tania tiene una segunda familia en Juana Díaz, que conoció un año posterior a su intervención y a la que le extiende todo su agradecimiento. 

“Los conocí a un año de mi trasplante. Una experiencia bien bella. La madre de mi donante se llama Giselle González y de verdad es como una segunda madre y la relación es bien poderosa porque, obviamente sabe que ella puede sentir un pedacito de su hijo en mí. Su hermanita es loca conmigo. Después de todo ha sido una bendición”, indicó quien hoy formó parte del lanzamiento de la nueva campaña de educación y concienciación de LifeLink, #Diseloatufamilia.

Tania Pérez dijo que experimentó unos tres infartos por su condición. (luis.alcaladelolmo@gfrmedia.com)
Tania Pérez dijo que experimentó unos tres infartos por su condición. (luis.alcaladelolmo@gfrmedia.com)

Además de Tania, se unen a esta iniciativa, el Centro Cardiovascular, así como José Vega a través de su personaje Remi, quien es el portavoz de la campaña y los reporteros de Univisión Alex Delgado de Jugando Pelota Dura, Luisa Sotero de Edición Digital y Karla Díaz de WKAQ 580. Mediante la campaña, LifeLink busca aumentar el registro de donantes de órganos y tejidos que actualmente alcanza los 686,972 personas registradas.

No obstante, hasta ayer unos 113,377 pacientes esperan por trasplante en Estados Unidos y Puerto Rico, según la United Network For Organ Sharing (UNOS). De estos, en Puerto Rico, 331 personas esperan por un riñón, 14 por hígado, dos por páncreas, ocho por riñón y páncreas, y un corazón.

En Puerto Rico solo el Centro Cardiovascular y el Centro de Trasplante del Hospital Auxilio Mutuo practica los trasplante de corazón, páncreas, riñones, hígado e hígado pediátrico. Las demás intervenciones se realizan fuera del país. Por petición del gobierno federal, LifeLink es el organismo encargado de la recuperación de los órganos para los trasplantes realizados tanto en Puerto Rico como en San Tomas y Santa Cruz por los pasado 25 años.

“Yo nunca pensé que mi vida iba a ser de esta manera, estar presente en este tipo de actividades, pero todo surge con grandes propósitos, incluso, después de una enfermedad me ha llevado hasta aquí y me siento orgullosa de dejar un granito en las vidas de LifeLink. Ahora veo cuántas personas son impactadas con una historia, que es la mía. Que lo que yo pasé, ahora mismo muchas personas lo están pasando y pueden identificarse con mi historia, pueden tener un pensamiento erróneo de lo que es la donación de órganos. Mi papá fue uno, el no creía en la donación de órganos, el decía ‘si algún día quieren quitarme mis órganos no me dejen morir’ y mira a quién le tocó, a su hija menor”, dijo Tania.

Para registrarse como donante de órganos, solo tiene que acceder a donevidapuertorico.org y completar el formulario. Con su registro pudiera estar ayudando a salvar alrededor de 60 vidas.