Sismo de hoy derrumba otra historia familiar
"Me dan ganas de gritar a veces”, relató Migdalia Román Vargas al ver en el piso lo que fue su hogar por tres décadas.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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Lajas. El nuevo sismo de magnitud 4.9 registrado esta mañana en la zona de La Parguera en Lajas derrumbó lo poco que quedaba del hogar de Migdalia Román Vargas, conocida como “Yayi”, en la comunidad Maguayo de este municipio.
Aunque su familia se encontraba en la residencia de un primo cuando sucedió el remezón, ya que la estructura fue declarada inhabitable desde el terremoto del 7 de enero, la mujer corrió a ver el lugar donde tejió una historia que comenzó hace 30 años.
“Hoy se derrumbó mi casa completamente, porque el día 7 de enero se derrumbaron los socos. Me da pena, porque se puede decir que ahí fue que yo pude terminar de criar a mi hijo. (Son) muchos recuerdos”, relató a Primera Hora la fémina de 66 años.
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“Me gusta esto aquí porque son mi familia”, confesó mientras observaba detenidamente los destrozos que dejó el temblor en la casita que habitó con su esposo, Vidal González, y su único hijo. Sin embargo, Román Vargas no podrá reconstruir la humilde estructura de madera ya que vivía bajo alquiler y, según manifestó, el propietario está “preso en los Estados Unidos”.
“Si la casa hubiera sido mía, la hubiera levantado, porque siete veces me caigo y siete veces me levanto. Ya por lo menos me dieron un techo para vivir. Me dieron para un apartamento en Parque Real II en Lajas y no estoy viviendo allí porque falta poner el agua. Fui a Sección 8 y me dieron ayuda, pero no conseguí la casa y pues, a lo último me dieron para el apartamento”, manifestó.
“Pero me siento triste. Me dan ganas de gritar a veces”, lamentó.
Mientras tanto, sus vecinos no salían del asombro al ver la casa, prácticamente, en el piso y también por el susto que pasaron cuando sucedió el nuevo temblor registrado cerca de las 9:54 de esta mañana.
“Yo estaba en la cocina, estaba haciendo arroz blanco y ablandando una ternera, y yo sentí como un trueno y mis nietos dijeron ‘se cayó la casa de ‘Yayi’, y me fui por la escalera de atrás y le dije a los nenes que no se fueran para al frente por los postes y los cables y me quedé ahí abajo”, relató, por su parte, Milagros Flores, quien reside hace décadas en esa comunidad.
“Estaba nerviosa y pensé que era la venida del Señor. Pero ‘Yayi’ me hace una falta, fue mi vecina de toda la vida”, dijo Flores, de 68 años.
Alcalde preocupado por las réplicas
Por su parte, el alcalde Marcos “Turin” Irizarry, sostuvo que el evento telúrico de hoy ha sido el más trascendental luego del terremoto de enero.
“Esta casa había sido desalojada y le pude conseguir una vivienda, pero hay más residencias aquí y ustedes pueden ver el poder de un terremoto y lo que pudo haber pasado, pero gracias a Dios no hubo pérdidas que lamentar, pero estamos bien preocupados, porque fue fuerte”, señaló.
El ejecutivo municipal se mostró preocupado ante las réplicas originadas en el área de La Parguera, sobre todo, por los residentes, pescadores y los visitantes que llegarán este fin de semana para disfrutar del feriado del 4 de julio.
“Estamos haciendo inspección en todas las áreas porque La Parguera incluye otros sectores en la costa que son áreas de pescadores y estamos bien comprometidos con ellos, pero esto afecta la pesca, sobre todo cuando hay estos eventos, aunque no sea un tsunami hay movimientos en el agua que los pescadores le temen y esto puede causar que en estos días se mantengan en su casa, que es lo más propio y no salgan a pescar”, reveló.
“Nosotros estaremos en continua vigilancia, tenemos el plan establecido, tanto el de la Policía como el de Manejo de Emergencias. Las calles de La Parguera están debidamente identificadas para los desalojos, que es lo más que nos preocupa y esperamos que no tengamos que hacer más ninguno”, agregó Irizarry al destacar que la zona cuenta con 700 residentes, y el área turística tiene un 90% de ocupación hotelera.
“Pero todos los hoteles, todos los ‘guest house’ tiene hasta un 75% siguiendo el código establecido por el gobierno por la situación de la pandemia. Espero que muchos no se hayan ido porque hayan cogido miedo”, concluyó