El Senado de Puerto Rico aprobó este lunes de manera unánime la Resolución del Senado 1195, para repudiar “las expresiones xenofóbicas, racistas y discriminatorias vertidas por el empresario Donald Trump” a la comunidad latina de Estados Unidos, particularmente a los mexicanos.

La medida de la autoría del portavoz de la minoría del Partido Nuevo Progresista (PNP), Larry Seilhamer, se aprobó por descargue, lo que significa que se relevó del proceso de evaluación en comisión, y no fue objeto de debate en el ‘floor’.

La R. del S. 1195, que fue presentada este mismo lunes por Seilhamer, establece la significativa presencia de los latinos en Estados Unidos, afirma que “el mercado hispano es fundamental para la economía estadounidense” y resalta las aportaciones de los inmigrantes al Ejército de ese país.

“Ante esta apretada síntesis de la importancia de la comunidad hispana en los Estados Unidos de América, resulta indignante escuchar unas expresiones xenofóbicas y discriminatorias realizadas por el empresario estadounidense Donald Trump. Su retórica derogatoria e insultante, vestigios de los postulados del apartheid y del antisemitismo, no puede ser tolerada y amerita el mayor rechazo. Sus expresiones contra los grupos hispanos solamente buscan provocar el odio, la furia y violencia entre los grupos. Sus manifestaciones intentan revivir el germen del racismo y la violencia étnica en momentos que ocurren lamentables eventos que provocan una ruptura en los postulados de igualdad racial que vive la nación americana”, lee la resolución a la que se unieron como coautores otros senadores del PNP y de la mayoría del Partido Popular Democrático.

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El Senado solicita, mediante esta resolución, el boicot a eventos relacionados a Trump.

“Como puertorriqueños ciudadanos americanos y miembros de la comunidad hispana, corresponde expresar nuestra mayor oposición y repudio a toda expresión racista y derogatoria contra cualquier comunidad. Exhortamos a su vez al mayor rechazo a toda participación en eventos u organizaciones comerciales con fines de lucro pertenecientes al señor Donald Trump, como ejemplo de la indignación ante sus constantes expresiones xenofóbicas, racistas y discriminatorias contra la comunidad hispana, particularmente, la comunidad mejicana”, indica el texto.

“Este Senado de Puerto Rico, como ha ocurrido en ocasiones anteriores, ha condenado inequívocamente la violencia extremista por la intolerancia étnica, religiosa y política. En este caso, las expresiones del señor Donald Trump incitan a esa violencia extremista por lo cual debe contar con nuestro mayor rechazo”, señala la medida.

La polémica nació de una serie de frases lanzadas por Trump en la ciudad de Nueva York durante el anuncio de su candidatura a la nominación del conservador Partido Republicano. "Traen droga, traen crimen, son violadores y algunos, asumo que son buenas personas, pero he hablado con guardias fronterizos y me dicen lo que estamos recibiendo. Y tiene sentido común, no nos envían a la gente adecuada", dijo el dueño del concurso Miss Universe en referencia a la población mexicana. 

Aunque, Trump también atacó a otros inmigrantes. "No sólo llegan de México, están llegando de Latinoamérica y Sudamérica y probablemente de Medio Oriente, pero no sabemos, porque no tenemos protección. Esto tiene que parar y tiene que parar rápido", manifestó.

A raíz de estas expresiones, una ola de indignación ha arropado las redes sociales y los medios de comunicación. Las televisoras NBC Universal y Univision cortaron sus relaciones laborales con Trump y múltiples artistas latinos han repudiado su proceder, entre ellos los puertorriqueños Ricky Martin y Roselyn Sánchez.