El hombre de California de 87 años, uno de los primeros casos positivo al coronavirus en Puerto Rico y que recibe tratamiento en el Mayagüez Medical Center, se recupera satisfactoriamente, según le contó al periodista de CBS News, David Begnaud.

El extranjero, identificado como Frank Eller, que iba a bordo de un crucero que pasaba por el Canal de la Mona cuando comenzó a experimentar los síntomas del COVID-19.

El paciente, un militar retirado de la Marina de los Estados Unidos, habló con Begnaud a través de una videoentrevista en la que se le ve animado, con mascarilla, pero hablando sin problemas.

Begnaud le indicó al principio de la conversación que era un placer y muy esperanzador conversar con un paciente en recuperación, que está en el grupo mayor de contagio.

“Me siento bien y afortunado de estar aquí en el Mayagüez Medical Center a donde me trajeron luego de ser desalojado de un crucero en el Caribe, que tenía una travesía de 14 a 16 días, luego de que me fuera sintiendo peor y tuviera problemas para respirar”, explicó el octogenario, quien acudió al médico de la nave al tercer día de presentar síntomas porque su esposa le insistió. Los síntomas incluyeron tos, pero no fiebre.

Contó que al hacerle una placa de pecho sus pulmones lucían con infección, le dieron antibióticos y se decidió traerlo a puerto.

Fue la Guardia Costanera la autoridad encargada de desalojarlo del crucero.

Indicó que al llegar al hospital de Mayagüez le hicieron la prueba del coronavirus, cuyos resultados tardaron seis días. Durante la espera lo mantuvieron en aislamiento con tratamiento de antibióticos y oxígeno para estabilizarlo.

El paciente especificó que no recibió asistencia de un ventilador, pues no fue necesario, y que ha estado consciente en todo momento.

¿En qué punto del tratamiento, comenzó a sentir alivio?, le preguntó Begnaud.

“Debo decir desde el momento en que me pusieron en aislamiento y comencé a recibir antibióticos, y me dieron oxígeno… fue casi inmediata (la mejoría)”, describió el paciente.

Su esposa, según compartió, tuvo que quedarse en el crucero al no ser desalojada, regresar al puerto de Miami, Florida y de ahí a su residencia, en San Diego. En California está junto a la hija de ambos y ya se realizaron las pruebas de COVID-19, pero no han recibido los resultados.

Eller reveló que tiene otros padecimientos de salud, entre ellos enfisema en un pulmón, condiciones cardíacas y neuropatía, lo que lo empuja más al grupo de alto riesgo con poca supervivencia.

“Lo sé”, dijo al respecto.

El exmilitar volvió a elogiar el trato recibido en la Isla y compartió que tuvo muchos compañeros puertorriqueños cuando estaba activo en la Marina.

Igualmente, se emocionó al compartir cómo quienes interaccionan con él en el hospital le expresan mensajes de apoyo en medio de la recuperación.

“Ellos nos me conocen personalmente…”, dijo mientras se le quebraba un poco la voz.

Si Eller continúa estable como hasta ahora pudiera recibir el alta médica tan pronto como mañana, domingo.

Begnaud, por su parte, le indicó que en el año 2017, a raíz del paso del huracán María, había tenido su primer contacto con boricuas a quienes describió como “felices y nobles”.

Los casos de coronavirus a nivel global suman 266,073, mientras que las muertes por la enfermedad que provoca ascienden a 11,184, informó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su web oficial.

Las cifras suponen un aumento de 32,000 casos y 1,344 fallecimientos respecto a las que la OMS dio el viernes, y con ello se supera la barrera de los 250,000 contagios y las 10,000 muertes en todo el mundo, según el mapa actualizado del avance de la pandemia.