Una familia viajó desde Las Piedras hasta La Fortaleza con un cartel que mostraba las impactantes imágenes de su residencia consumida por un incendio que se desató en su hogar luego que le regresara el servicio de energía eléctrica tras el apagón general que sufrió el país el pasado 6 de abril.

César Sánchez y Caralys García fueron parte de los cientos de ciudadanos que llegaron cansados por los inconvenientes que han atravesado en los pasados meses por las constantes interrupciones en el servicio de energía eléctrica y que exigieron la cancelación del contrato que mantiene el gobierno con LUMA Energy.

Lo perdimos todo, todo”, lamentó Sánchez.

Las fotos mostraban el interior de la residencia cubierto de ceniza, enseres quemados y aquello que llamaban hogar completamente destrozado.

Mi familia está sufriendo mucho en estos momentos gracias a ellos (LUMA). Queremos que se vayan ya. No creo en ellos. No creo en sus palabras. No nos respetan como boricuas. Como familia, queremos que se vayan. No sirven”, sostuvo García.

La familia añadió que, hasta el momento, no han recibido compensación alguna por parte de la empresa tras la tragedia.

El consorcio privatizador administra la transmisión y distribución del sistema eléctrico del país desde el 1 de junio del año pasado en medio de constantes quejas de la ciudadanía por la calidad del servicio y las incesantes interrupciones.

Hay momentos en el que la paciencia se acaba. Y a este país la paciencia se le acabó”, se escuchó desde los altoparlantes que animaban la manifestación.

Aunque en ocasiones lloviznó, la gente se mantuvo firme en sus lugares entonando consignas contra la empresa y el gobernador Pedro Pierluisi.

Cientos de ciudadanos se agrupan en el Viejo San Juan para repudiar el desempeño del consorcio eléctrico.

“Ese contrato es un robo, es el pueblo quien paga el robo”; “LUMA, fuera; Pierluisi, fuera”; “LUMA es lo peor para el pueblo trabajador” y “No habrá paz si es que LUMA no se va”, fueron algunos de los estribillos.

Entre los manifestantes habían personas de todas las edades, sexos y géneros. Llegaron solos, en familia, con amistades o con “compañeros de lucha”. Les unía el mismos sentimiento de hastío, de cansancio, de molestia.

Entre la muchedumbre también estaba Jalil Rodríguez Pérez, quien dijo haber radicado una querella en LUMA desde el 17 de septiembre del año pasado.

Llamé en noviembre. Llamé en marzo. Fui en junio a las oficinas centrales y no me han resuelto porque dicen que, supuestamente, estoy en turno. Es para un desganche”, contó el residente de Bayamón.

Rodríguez Pérez aseguró que el problema provoca que se le vaya la luz, “mínimo dos veces a la semana”, además de “los muchos bajones” en el voltaje.

Desde antes de las 3:30 de la tarde, los manifestantes comenzaron a llegar a la “esquina de la resistencia”, bautizada así por las multitudinarias protestas que se desataron en la zona en el verano de 2019 para exigir, con éxito, la renuncia del entonces gobernador Ricardo Rosselló. Pasadas las 7:30 de la noche, continuaban llegando ciudadanos al Viejo San Juan.

El conglomerado de personas se extendió por toda la calle Fortaleza hasta la intersección con la calle San José.

“Es un contrato diseñado a medida de LUMA: todo para allá y nada para acá. Ahora que la indignación del pueblo está al tope, están buscando métricas. Para nosotras, las únicas métricas que importan son las humanas, es el sufrimiento”, sostuvo Elsie de Jesús, de Mujeres contra LUMA, desde una guagua que estaba estacionada frente a la mansión ejecutiva.

“La gente que tiene enfermos en sus casas viven con ansiedad. Con LUMA no habrá paz. Con los aumentos, la gente tiene que decidir si pagar la luz, su comida o sus medicamentos. No importa los cambios que anuncien, LUMA se tiene que ir”, añadió.

De Jesús apuntó que respaldan la propuesta de Queremos Sol, para transformar el sistema eléctrico a uno de energía renovable.

Asimismo, propusieron que la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) vuelva a asumir el control total del sistema. Sin embargo, puntualizó que debía ser “una AEE transformada y transparente” y no una corporación politizada.

Entre los manifestantes estaba la clase política del Partido Popular Democrático, el Partido Independentista Puertorriqueño y el Movimiento Victoria Ciudadana. Además, hubo representación de organizaciones como el Sindicato Puertorriqueño de Trabajadores, Jornada se Acabaron las Promesas, la Alianza Energética, la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios y Educamos, entre otros.

El cantautor René Pérez Joglar, mejor conocido como Residente, acudió al piquete que se llevó a cabo frente a calle Fortaleza en el Viejo San Juan.
El cantautor René Pérez Joglar, mejor conocido como Residente, acudió al piquete que se llevó a cabo frente a calle Fortaleza en el Viejo San Juan. (Ramón “Tonito” Zayas)

El representante independiente Luis Raúl Torres dijo presente y recordó que lleva dos años supervisando desde la Comisión de Energía el contrato “leonino” de LUMA Energy.

“Tenemos evidencia para demostrar el incumplimiento del contrato: aumento en los apagones, ingenieros sin licencias y la falta de respeto de la alta gerencia de LUMA. Me alegro que artistas, influencers, comentaristas radiales y el pueblo se hayan autoconvocado. Hay que sacar a LUMA. Si el gobernador no entiende que los vientos huracanados están soplando hacia LUMA, en 2024 también se lo van a llevar a él”, apuntó.