Una estela de antorchas encendidas a la orilla de la carretera PR-10 en Adjuntas, señalaba el camino hacia un nuevo establecimiento gastronómico que, en poco tiempo se convirtió en uno de los preferidos de la zona central.

De pronto, la cocina argentina cobró otra dimensión cuando en 2011 abrió el Restaurante Hacienda Maribó en el sector Juan González de la llamada ‘Suiza de Puerto Rico’ que, desde entonces, ha sido consistente en el ofrecimiento de la comida gaucha con un toque de la sazón local.

Allí se fusiona un concepto único en la isla que, incluye una exquisita variedad de carnes cuyos cortes se confeccionan en el lugar, en un ambiente fascinante dominado por sus bajas temperaturas y una mirada directa hacia la montaña que origina la leyenda del ‘gigante dormido’.

Además, el sitio posee un área donde los visitantes pueden apreciar ovejos y ponys que, forman parte de la experiencia en este restaurante propiedad Marissette Varona González, una jayuyana de 58 años.

La mujer que, tiene cuatro hijos y cinco nietos, recordó que se adiestró en el mundo de la gastronomía con un chef boricua especializado en cocina española.

“Me entrené con un chef puertorriqueño de cocina española, le decíamos papa Frank, mientras corría un restaurante en Ponce. Estuve cuatro años y medio trabajando en una cocina. Entrabamos a las 10:00 de la mañana, salía a las 4:00 de la tarde, me bañaba y me vestía y entonces, era la mejor ‘host’ hasta por la noche. Ese fue mi entrenamiento”, contó.

Fue en 2010 cuando le ofrecieron los terrenos que albergan su negocio y que, actualmente es fuente de empleo para 30 personas.

“Todo esto era un terreno baldío, era un monte, no había nada, no era ni zona comercial. Lo que había eran árboles que tampoco eran frutales, era un terreno sin cultivar. Entonces, nos dimos la tarea con unos amigos de Ponce, a reestructurar cómo podíamos poner esa montaña fácil para nuestros comensales”, relató la hija de Héctor y Nilda.

“Cuando abrimos, nos anunciábamos en la carretera PR-10 con antorchas, era de la única forma que la gente se iba a dar cuenta que nosotros estábamos acá arriba. Todos los días se prendían 22 antorchas a las 6:00 de la tarde para que la gente viera que estábamos acá arriba”, confesó.

El éxito llegó como fruto del intenso trabajo y dedicación. Sin embargo, ocho meses antes del desastre ocasionado por el huracán María en 2017, la propiedad de Varona González enfrentó una prueba bastante dura. Su cocina se quemó.

“Pero yo trabajo a través del Señor y me encomiendo a él todos los días y, cuando más destrozados estamos, más rápido nos levanta, pero siempre es la gloria de él”, reveló al reconocer el rol que juegan Carolina Morel y su esposo, David Alcover, quienes representan su mano derecha en la operación de su empresa.

El espacio está dividido en tres segmentos y cuenta con capacidad para atender a 170 comensales que, disfrutan de una sazón diferente en un lugar elevado con vista hacia la montaña del gigante dormido y un poco del casco urbano adjunteño.

El menú

Con unos 25 platos principales, el menú del Restaurante Hacienda Maribó está basado en la cocina argentina de carnes.

“Decidimos hacer toda la comida argentina con la fusión de la comida puertorriqueña. Ahí entra nuestra sazón, nuestro adobo, nuestro arroz y, las habichuelas son ablandadas acá por manos puertorriqueñas. Así que, fusioné todo tipo de carnes, no las compro por porciones sino en posta y nosotros hacemos nuestros propios cortes”, manifestó.

Aunque el churrasco es la sensación de la carta, Marissette reconoció que, “depende del gusto del fin de semana”.

“Puedo tener un fin de semana que me convierto en una marisquería porque todo el mundo quiere mariscos, tenemos buena calidad, pero por lo general son las carnes como churrasco y miñón. La gente tiene buen paladar y confían en el negocio que, aunque seamos en la montaña, tenemos un buen suplidor de mariscos frescos”, acotó.

Otras alternativas son el filete de salmón. medallones en salsa de setas, asado de tira, vacío argentino, ribeye, así como monfongos rellenos de churrasco, langosta, carrucho, filete de res, entre otros. También tienen pechuga rellena de camarones, milanesa de pollo, chuletas kan-kan y carne frita.

“El que se quiera quedar escuchando la música, los coquíes, sentir el fresco de la montaña, por lo general piden la parrillada que, tiene cinco tipos de carne, entonces se alargan más su estadía en el negocio. La parrillada lleva chorizo, morcilla, asado de tira, pollo y churrasco”, agregó.

En cuanto a los aperitivos, uno de los favoritos es el chorizo al vino, pero también presentan cocteles de pulpo, camarones o carrucho, al igual que empanadillas de espinaca, tiritas de pescado, yuca al chimichurri y las albóndigas en salsa de vino.

Mientras que en postres reina la bochada que está hecha con hojaldre, “una fusión de queso, se hornea, se pasa por azúcar negra y canela, y se sirve con salsa de guayaba y bolitas de helado”. La sangría de la casa es otra experiencia al paladar, además de variedad de mojitos y vinos para escoger.

“Ha sido un despertar, gratificante, una escuela para muchos. Sobre todo, ha sido una alabanza, cada vez que nos pasa algo bueno o malo, siempre vemos la mano del Señor. Pero ha sido mi hogar y he podido tener familia extendida. Para mí, eso ha sido siempre importante”, concluyó.

Para detalles: 787-202-4305 o Restaurante Hacienda Maribó en Facebook.