Residente de Ponce: “Mi casa como que subía y bajaba”
Elizabeth García narró que pudo mantener la calma para manejar la situación.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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Con este nuevo episodio de temblores que afectan la zona sur de Puerto Rico, Elizabeth García dice haber aprendido a mantener la calma y reaccionar mejor.
La mujer residente de Villa de Carmen en Ponce narró que aunque el fuerte movimiento de 5.4 grados de esta mañana la sorprendió, pudo manejar sus emociones. Otras réplicas se han sentido luego del movimiento inicial, que ocurrió a eso de las 7:13 a.m.
“Se sintió como de 7 (grados de magnitud). Mi casa como que subía y bajaba, pero esta vez lo cogí como con más inteligencia… esperé que pasara, encontré a mi esposo y una vez pasaron las réplicas, pudimos sacar todas las cosas e irnos para Villalba, porque mi familia es de Villalba”, explicó García, cuya casa está localizada en zona de tsunami.
“Yo tomo mis precauciones y me voy”, enfatizó.
Explicó que desde enero -cuando se registró el movimiento de tierra más fuerte hasta el momento, de 6.4 grados de magnitud- mantiene sus maletas preparadas en casa de su madre, en Villalba, para arrancar “y no tener que estar buscando cosas a última hora, porque esto puede ser de noche, de madrugada”. Allá dice sentirse más segura, por ser una zona montañosa y libre de tsunami.
“Mi preocupación mayor es el agua, porque la casa es fuerte, pero el tsunami no sabes cuándo llega”, aseveró mientras esperaba por entrar a una farmacia de la Ciudad Señorial.
Indicó estar preocupada de observar el distanciamiento físico recomendado para lidiar con la pandemia del coronavirus y que se pueda pasar por alto ante la reacción inmediata a un temblor.
Benjamín Márquez, residente de sector Playa, dijo, por su parte, que esta mañana “sentí el revolú, me levanté e hice lo que tenía que hacer”.
Aprovechó para almacenar agua y abastecerse de gasolina, ante el temor de que continúen las réplicas y se quede sin servicios esenciales.
El hombre, que vive solo, indicó que su mayor preocupación es que sigan las sacudidas de tierra. Reconoció que no tiene una mochilla de emergencia lista, por lo que se disponía a prepararla.