¿Quién le quitó el rincón a Fela?
Llama la atención que el mural que recién se erige en Puerta de Tierra tenga la firma de la ex alcaldesa, con el “Gautier” de su marido.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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Felisa ¿R?... Felisa ¿R Gautier?...
¿De dónde salió ese nombre, si a la alcaldesa más famosa que ha tenido San Juan siempre se le conoció con el apellido de su padre?
El apellido del marido de doña Fela -el de don Genaro Gautier-, en el imaginario boricua nunca fue un sello de identidad de la ex alcaldesa, y el Rincón-ese, el de la “R”-, ella jamas lo ocultó, por lo menos en su comunicación oral.
Doña Felisa Rincón sí fue conocida como Felisa Rincón “de Gautier”, que era como se estilaba denominar a todas las casadas en Puerto Rico, en su tiempo.
Entonces, ¿por qué en el mural que el Municipio de San Juan comisiona en su honor aparece ese extraño “Felisa R Gautier”?
¿Por qué en 2015, aparece el nombre de la primera mujer alcaldesa de una capital de las Américas con un apellido que no es el propio?
¿Acaso la alcaldesa Carmen Yulín Cruz no es feminista? ¿O es que simplemente se trata de un error?
Primera Hora investigó y fue a la fuente más certera: a doña Hilda Jiménez, quien fue secretaria de doña Fela de 1949 a 1986.
Doña Hilda desveló el manto de misterio del mural de Puerta de Tierra.
Aunque doña Fela se hacía llamar Felisa Rincón de Gautier, los documentos los solía firmar como “Felisa R. Gautier”.
“Con el tiempo ella fue achicando su firma… Para el mural usaron una tarjeta de Navidad donde aparece ella firmado de esa manera”, aclaró doña Hilda, resolviendo el enigma de por qué en el mural queda eliminado el Rincón de don Enrique Rincón Plumey, el padre de doña Fela.
El enorme mural del paseo que se construye en Puerta de Tierra contiene otro elemento que para la década de 1950 causó una enorme polémica en Puerto Rico: copos de nieve.
Esos copos aluden a la nieve que en 1952, 1953 y 1954 la ejecutiva municipal trajo a Puerto Rico, desde los Estados Unidos, para que la niñez sanjuanera la viera por primera vez.
“Aquel día que vi a los niños jugando con nieve en el (estadio) Sixto Escobar y recordé mucho mi infancia, porque de mis 90 años el instante más feliz fue cuando Mr. Rickenbecker me dijo: ‘Pues tendrán nieve esos muchachitos’”, se lee en una tarja que los artistas ubicaron en la obra de arte.
El independentismo puertorriqueño, consistentemente, ha censurado a doña Felisa por aquellas nevadas navideñas, que llegaron a catalogar como una manifestación de colonialismo.
“Para mí la vida es lucha y servicio. Quien no lucha y no sirve, se priva a sí mismo de la mayor satisfacción que puede proporcionar la vida”, es la cita que exhibe el mural y que se remata con la firma de Felisa… sin el Rincón.
El mural de mosaicos a la entrada del Viejo San Juan mide 450 pies de largo, y es obra de Cero Design, quien ha hecho otros similares en varios puntos de la Isla, entre ellos uno en Carolina, en honor del ex alcalde José Aponte de la Torre.
Celso González y Roberto Biaggi lideran la empresa.
La idea de honrar a Felisa Rincón con esta obra monumental es del Municipio de San Juan y del Museo Felisa Rincón de Gautier.