Sabana Grande.-  Parece que el afortunado que se llevó este fin de semana los $50 millones del Powerball, cree mucho en el refrán de que en  boca cerrada no entran moscas.

Por eso, nadie en Sabana Grande sabe quién es el suertudo.

Ayer los vecinos del barrio Susúa todavía se preguntaban quién sería la persona ganadora del premio millonario que se vendió el domingo en el supermercado Los Rodríguez.

No obstante, le auguran buena suerte “y que se los goce”.

El  jugador se convirtió en millonario tras acertar la combinación 13, 22, 23, 29, 31 en el Power Play 17. Nadie más acertó ese mismo número, por lo que el premio se lo llevó todito.

Entretanto, en el pueblo la gente ya sueña con lo que haría si hubiesen ganado el premio y hasta le recomiendan que lo retire de un solo pago.

“Cuando me enteré, me dije ¡wow! Eso es al ladito de casa”, expresó Johana Velázquez, considerando que “como siempre el dinero se da para Estados Unidos o el área metropolitana”, jamás pensó que se daría en su misma comunidad.

“(Al que ganó) le diría que los disfrute, que me alegro.  Yo, (si tuviera el premio), de inmediato ayudaría a mis padres y a mis hijos en la universidad”, dijo. 

Al igual que muchos en el pueblo, Johana duda que la persona ganadora del premio quiera salir a la luz pública, pues según dijo, “aquí la gente es más tranquila y calladita y no lo va a decir”.

Dijo que  “el ganador podría estar en cualquier sitio”.

Ciertamente, el reperpero se escuchaba entre los clientes del  comercio situado en la carretera PR-121, en el que ni los empleados han podido adivinar quién es el nuevo millonario de la Ciudad del Petate, pues resulta que en este colmado juega gente proveniente de sectores como Magina, Arenas y  de los pueblos colindantes de Yauco y Guánica.

Por su parte, la cajera que recibió la noticia de que el premio se dio en la misma tienda donde trabaja, Elimary Vega, afirmó que la sorpresa los dejó a todos en medio de una algarabía de júbilo e intriga.

“La vendedora de los juegos vino y nos dijo que nos dimos el premio. La gente empezó a preguntar y nosotros a celebrar. Nos preguntaban (quién es el ganador), pero como aquí juega tanta gente no sabemos”, señaló.

Edwin Pagán es un cliente que frecuenta la tienda a pesar de que reside en Maricao, y deseó haber sido el ganador, pero no jugó esta vez el Powerball.

Al enterarse de que el premio se dio en el colmado en el que siempre se apuesta uno que otro pesito, se lamentó grandemente. 

“Desearía ser yo el que se ganó el premio, ¡pero imagínese! Uno que juega así, solo a veces que lo sueña”, expresó a su salida del supermercado Los Rodríguez, donde aprovechó para jugar  el Pega 3, por aquello de no perder la oportunidad nuevamente. 

Entretanto, Ismael “Junito” Toro, empleado de la tienda desde hace algunos 11 años, recordó que la propietaria del establecimiento, Marta Rodríguez Caraballo, llevaba tiempo diciendo que el próximo premio se daría en su local.

“La dueña siempre dijo que aquí iba a caer. Como cayó un premio un poquito más adelante (en la misma carretera hace unos meses), decía ‘juega con fe que aquí van a darse los próximos millones’. Ella siempre es así, bien positiva”, señaló el empleado, que aseguró  que ahora le harán más caso que nunca a lo que ella diga, porque atinó.

“La esperanza siempre la tenemos todos. Gracias a Dios cayó aquí el premio. Seguro se lo ganó alguien que se lo merecía y de bajos recursos, porque aquí casi todos los que jugamos somos de bajos recursos”, señaló don Alcides Rodríguez, quien dijo que siempre va  a esa tienda a jugar sus pesitos y ya ha tenido suerte con el Pega 3.