Que sí hay propuestas. 

Esa fue ayer la respuesta de un grupo de profesores que por segunda vez llegó a los portones del recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR) para pedir a los estudiantes en huelga que permitan el acceso al campus y que se contemplen otros métodos de lucha.

Ante la manifestación silenciosa y la mayoría vestidos de blanco, estudiantes y miembros de la Asociación de Puertorriqueña de Profesores Universitarios (Appu) y de la Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (Heend) le dieron la bienvenida coreando “Propuestas sí, silencio no”. 

Minutos después de retirarse de los portones, el profesor Jorge Giovannetti conversó con este medio e hizo referencia a un paquete de propuestas que la facultad del Departamento de Ciencias Sociales aprobó el pasado 10 de marzo de cara a los recortes millonarios requeridos por el gobierno de Ricardo Rosselló y la Junta de Supervisión Fiscal.

Entre las medidas para atraer nuevos ingresos, una lista de 16 sugerencias, se incluye la creación de una Fundación de Egresados de la UPR y de un laboratorio exterior de Antropología Forense que “generaría fondos externos al atraer personas del Caribe y América Latina para tomar adiestramientos” con uno de los pocos especialistas en esa área, así como examinar posibles aumentos en el costo de algunos servicios.

Algunas de ellas, como mejorar el sistema de patentes, rehabilitar las desperdiciadas residencias de la facultad y rentarlas a profesores y estudiantes graduados, la tasación y ventas de propiedades heredadas por la UPR por ley, entre otras, han sido propuestas que durante años diversos sectores, incluyendo los estudiantes, han estado poniendo sobre la mesa a las autoridades universitarias, pero han quedado durmiendo el sueño de los justos.

“Ellos (los estudiantes) no saben toda la labor que se ha realizado (dentro de los portones) que puede apoyar sus argumentos”, dijo la profesora de arquitectura Ana Georas.