A raíz del auge en popularidad de la serie “Orange is the New Black” -basada en las experiencias vividas por la estadounidense Piper Kerman, convicta por cargos de lavado de dinero, durante su sentencia de 15 meses en una cárcel de seguridad mínima- Primera Hora visitó en diciembre de 2014 la cárcel de mujeres de Vega Alta para exponer a tres confinadas a los primeros 13 episodios del programa de Netflix.

Tres periodistas –los reporteros Libni Sanjurjo Meléndez y Mario Alegre Femenías, y el fotoperiodista José “Pipo” Reyes- asistieron de martes a jueves durante tres semanas a la institución penal cargando con todo el equipo necesario para transmitir la serie: una laptop, una pantalla retractable, un proyector, extensiones eléctricas y un “hub” que habilitaba una conexión inalámbrica a Internet. Tras ver entre uno y dos capítulos diarios, la conversación se trasladaba a una celda ubicada en el salón de visitas de la prisión para dar paso a las entrevistas que se recogen ahora en este especial.

Marta, Jackeline y Marinela hablaron de lo que veían en la serie, de cuán similar es la vida de Piper Chapman y sus compañeras de prisión a la de ellas, de sus personajes favoritos y de lo que aprendían de cada personaje.

Pero, más allá de la serie, compartieron sus historias de la vida real. ¿Quiénes eran? ¿Qué las llevó hasta ese lugar? ¿A quiénes dejaron en el camino? ¿Cómo sus vidas pudieron haber sido distintas? ¿Cómo la cárcel las transformó? Y, por supuesto, ¿cómo ven su futuro?

Se trata de criminales convictas –dos por violaciones a las leyes de sustancias controladas y una por asesinato- pero, después de más de 10 horas de entrevistas, quedó claro que las tres son prisioneras de sus circunstancias y de su pasado desde mucho antes que les dictaran sus sentencias. Los invitamos a conocer esta serie, que se divide en cinco episodios (uno por día) y complejas historias.

Visita el especial Prisioneras del Pasado