A Jednnielys Pérez Rivas la alegría se le sale por los poros porque dio sus primeros pasos con la prótesis preparatoria que le colocaron en la pierna derecha, que perdió en un accidente de tránsito en Aruba cuando vacacionaba con su familia en agosto pasado.

La niña viajó hace pocos menos de una semana a Orlando, Florida, junto a sus progenitores Alexandra M. Rivas y Johnny Pérez, y su hermano Ángel Joniel, para continuar con las terapias.

Tras cumplir con el tratamiento aquí, la familia se mudó a EE.UU. donde “estamos gestionando todo nuevamente para que ella continúe, no tenemos el hospital donde le darán las terapias porque todo es un proceso, y hay que esperar a que sea evaluada, pero gracias a Dios estamos acá”, dijo Rivas vía teléfono.

Aunque no tenían todos los recursos económicos, por lo menos pudieron pagar los pasajes y alquilar un apartamento, mientras esperan por la respuesta del plan Medicaid.

“Tan pronto contesten entonces voy buscando un pediatra de cabecera que determinará qué es lo más favorable para ella”, agregó la madre de la niña, quien está eufórica por la prótesis y el andador. 

 “El día que llegó con la prótesis Nicky Valentín (que siempre ha estado pendiente de ella), eso fue un caos en HealthSouth (en Río Piedras). Ella se puso tan y tan contenta, porque ella sabe que de eso depende que ella pueda pararse”, indicó Rivas.

Relató que “todos estábamos llorando, pero de felicidad porque ver la alegría de ella, eso fue. Ella estaba súper contenta y decía ‘qué bueno’”, explicó la madre.

Lo más que le gustó a ella es que la prótesis se la hicieron “de gatitos, porque a ella le gustan los gatos. Ella estaba, olvídate, bien contenta”.

Jednnielys, de 7 años, dio gracias en un mensaje de texto enviado a Primera Hora, “a papito Dios primero que nada y al pueblo puertorriqueño por ser tan generoso en sus oraciones y buenos deseos”.

También agraedicó a los “doctores de mi Isla y a las compañías Home Orthopedics, AxisCare y la Fundación Roberto Clemente (es que) me puedo levantar”, y confía en que pronto regresará “caminando”. 

¿Cómo es un día en la vida de Jednnielys?

“Todos los días la montamos en el andador, le damos las terapias en casa, nos ponemos a pintar, a leer, hacemos cosas que la mantengan siempre activa. Está bien contenta. No he visto ninguna depresión que uno diga, ‘bendito’. Ella nos ha dado una cátedra a todos nosotros. Nosotros acá preguntándonos 20 cosas y ella está súper contenta, siempre está alegre. Toma las cosas bien tranquila, entiende todo lo que uno le dice y para nosotros eso es favorable”, sostuvo Rivas.

Jednnielys, quien cursaba el segundo grado en la Isla, pronto reanudará sus clases, pero antes será evaluada “en el Departamento de Orange County, que son los que se encargan para buscar un acomodo razonable, para que no se atrase”.

En el caso de Ángel Joniel, le buscan una escuela cerca del área, pero también tiene que pasar por evaluaciones académicas.