El equipo tecnológico que tiene en su hogar, y que ya no utiliza, puede ser de gran ayuda para una persona necesitada que no cuente con los recursos para adquirirlo.

Por ello, el Programa de Asistencia Tecnológica de Puerto Rico (PRATP, en inglés) del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, que se especializa en proveer diversos servicios relacionados con la asistencia tecnológica a personas con impedimentos, familiares, profesionales y organizaciones, hace un llamado a la comunidad a donar los artículos que no estén utilizando durante el evento “Gran Recogido de Equipos de Asistencia Tecnológica”.

La actividad se realizará el próximo viernes, 26 de abril, de 8:00 a.m. al mediodía, en las oficinas del PRATP situadas en el Jardín Botánico de la UPR, área norte.

Algunos de los equipos que se pueden donar son:

• Sillas de ruedas manuales
• Sillas para ducha
• Grúas de transferencia de pacientes
• Bastones
• Andadores tipo “rollator”

Previo a realizar la donación, las personas interesadas en participar de esta iniciativa filantrópica deben comunicarse al (787) 474-9999 o visitar la página web www.pratp.upr.edu para indicar el equipo que desean donar.

“En PRATP estamos comprometidos con promover el acceso a la asistencia tecnológica y proveer diversos servicios relacionados con la asistencia tecnológica a personas con impedimentos, familiares, profesionales y organizaciones. A través de la coordinación con diversas entidades, iniciativas y miembros de la comunidad, nos aseguramos de que aquellos que lo requieren obtengan equipos de asistencia tecnológica y el servicio necesario para vivir de manera autónoma y empoderada. Cada contribución cuenta, y juntos podemos hacer una gran diferencia en la calidad de vida de quienes más lo necesitan”, expresó por escrito María Hernández, directora de PRATP, entidad adscrita a la Escuela de Profesiones de la Salud.

La Dra. Lourdes Soto de Laurido, decana de la Escuela de Profesiones de la Salud, por su parte, expuso que “este tipo de iniciativas refuerza nuestro compromiso con la salud integral y el bienestar de personas con impedimentos”.

“La participación de la comunidad es esencial. Si alguien cuenta con silla de ruedas, bastones o equipos de asistencia tecnológica sin usar, puede ponerse en contacto. Muchas personas que lo necesitan se lo van a agradecer. Juntos, podemos ayudar a construir una comunidad más inclusiva y solidaria”, añadió Soto de Laurido.