Luquillo.  A paso lento, pero seguro se levanta la zona industrial de Mata de Plátano, ubicada en la carretera PR-992 tras  décadas de abandono.

Allí se trabaja para revitalizar la actividad económica y crear nuevos empleos en el municipio del litoral norte.

De los 21 edificios que por años estuvieron abandonados tras eliminarse  la Sección 936,  solo quedan cuatro disponibles, según datos ofrecidos por la Compañía de Fomento Industrial (Pridco).

Durante una visita del director ejecutivo de Fomento, Antonio Medina Comas, a la empresa Sabrina Brottling Group, una de las más recientes en establecerse en Mata de Plátano, él  aseguró que la zona industrial ha mantenido un constante crecimiento y apostó a que  redundará en beneficios económicos y la creación de nuevos empleos para la zona.

“El resultado de este parque industrial es que edificios que estuvieron vacíos ahora tienen actividad industrial. En el caso de Luquillo, el alcalde Jerry Márquez es realmente un aliado importantísimo para nosotros y con su ayuda hemos logrado que varias nuevas empresas se establecieran en esta zona industrial”, explicó el también ingeniero a la vez que informó que próximamente se espera que otra compañía de operación local se establezca en la zona.

“Ya una de las empresas que recientemente comenzaron operaciones en la zona nos pidieron el edificio de al lado, así que vemos que en este parque industrial hay mucho movimiento positivo de creación de empleos y generación de empresas locales”, sostuvo el funcionario.

Según Medina Comas, la estrategia de Pridco es preservar y crecer  la base industrial local a través de expansiones en las compañías existentes y atraer nuevas empresas a establecerse, no solo en la zona industrial de Mata de Plátano sino en otra que han corrido la misma suerte.

“Lo importante es diversificar nuestra base industrial. Tenemos que asegurarnos que preservamos las compañías que tenemos, que ayudamos a crecer a estas compañías y no es una cuestión de decir las grandes  las pequeñas sino que tiene que ser en conjunto”, indicó.

Sin tiempo que perder

Para el matrimonio compuesto por Noel Maisonet y Nixzaliz Rivera, propietarios de la compañía de sangría Sabrina Bottling Group, la iniciativa de Pridco fue una “bendición” caída del cielo al permitirles reinventarse luego de que ambos perdieran sus respectivos empleos.

“Hemos logrado mucho desde que empezamos en el 2010.  Yo soy ingeniero civil y mi industria cogió un cantazo bien grande. Mi esposa viene de la automotriz, que también sufrió mucho con la caída de la economía y los dos nos quedamos sin trabajo”, explicó Maisonet, quien es natural de Toa Baja, pero reside en Luquillo.

“Yo tenía esta receta de sangría que le gustaba a todo el mundo y me insistían en que la embotellara porque iba a ser un éxito y decidimos entonces reinventarnos y comenzar con nuestro propio negocio. Sabemos que esta historia ha sido la de mucha gente aquí en Puerto Rico”, añadió.

Con una operación actual de 500 cajas de sangría al mes, la pareja de ocho años de matrimonio espera que este año finalice con un incremento de 1000 cajas al mes, que a su vez redundará en la creación de más empleos.

“Ahora mismo tenemos cinco empleos full time y tres a medio tiempo. Esperamos que ahora en verano aumente la operación y tengamos que contratar más personal. También estamos dando pasos firmes para exportar este producto a los Estados Unidos”, explicó, por su parte Rivera, natural de la urbanización Brisas del Mar en Luquillo.

“Nunca nos habíamos metido en un negocio como este pero gracias a Dios hemos tenido muy buena aceptación en el área este y seguimos expandiéndonos por toda la Isla. En Puerto Rico existen oportunidades, solo hay que tener ganar de echar hacia adelante y lograrlo”, añadió.

Sabrina Bottling Group produce dos tipos de sangría: la tradicional con vino tinto y una receta especial que utiliza vino blanco. 

Aunque originalmente la compañía solo distribuía su producto a restaurantes de la zona noreste, actualmente la sangría  está disponible en las principales cadenas de supermercados, licorerías y otros establecimientos a lo largo de toda la Isla.