Viene más lluvia.

Luego del paso del poderoso huracán Beryl a más de 200 millas al sur de Puerto Rico, aire seco dominará las condiciones del tiempo en la isla este miércoles. Sin embargo, esto no durará mucho, porque una onda tropical llegará para el feriado del jueves, 4 de julio.

Esta zona de mal tiempo tuvo altas posibilidades de desarrollo ciclónico en el fin de semana, pero perdió organización. Ayer tenía un 20% de posibilidad de convertirse en depresión o tormenta en siete días.

“Las condiciones ambientales son solo marginalmente propicias para cualquier desarrollo de este sistema mientras se mueve, generalmente, hacia el oeste a 15 a 20 mph a través del Atlántico tropical oeste y el Mar Caribe este. Independientemente del desarrollo, son posibles ráfagas de viento y fuertes lluvias localmente a medida que el sistema cruza las Antillas Menores hasta mediados de semana”, indicó ayer el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) en el boletín sobre las perspectivas del trópico.

La onda pudiera dejar acumulaciones de lluvia de hasta dos pulgadas.

Mientras, las aguas del Mar Caribe continuarán peligrosas, con alto riesgo de corrientes marinas hasta el mismo jueves.