Obispo metodista apoya la educación con perspectiva de género
La Ley 108 del 26 de mayo de 2006 ordenó al DE y a la Oficina de la Procuradora de las Mujeres crear un currículo con el componente de equidad, que hasta ahora no se ha concretado.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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El líder de la Iglesia Metodista de Puerto Rico, obispo Rafael Moreno Rivas, publicó hoy, viernes, una carta pastoral en la que afirma que la educación con perspectiva de género es “cónsona con los valores del Reino de Dios y los principios sociales” que rigen su congregación.
“A través de la educación con perspectiva de género reconocemos las relaciones de desigualdad, opresión e injusticia en la organización social y nos mueve a un compromiso en la construcción de relaciones de género equitativas y justas. Afirmamos la necesidad de la educación con perspectiva de género y que la misma, es transversal a todas las esferas de la vida”, expuso el líder cristiano en la misiva.
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El obispo contextualizó que las desigualdades “suelen materializarse en múltiples manifestaciones de violencia” y que Puerto Rico sufre los efectos de muchas de ellas, en particular por los crímenes de violencia de género y sexual, así como los miles de reportes de abuso sexual de menores, que incluyen pornografía infantil.
“La violencia doméstica, la violencia sexual, el hostigamiento, la diferencia en la paga a hombres y mujeres por igual trabajo, la falta de oportunidades para el desarrollo del potencial humano son algunas de las manifestaciones de la violencia de género que encuentra en las mujeres sus principales víctimas”, enumeró.
“Como una estrategia para prevenir y responder a la violencia de género, los organismos internacionales han recomendado la educación con perspectiva de género”, agregó el líder metodista, quien además citó pasajes de la Biblia como el Evangelio según San Juan.
“Rechazamos la errónea noción de que un género es superior al otro, que un género ha de luchar contra el otro, y que un género puede recibir amor, poder y estima solamente a costa del otro. Especialmente, rechazamos la idea de que Dios hizo a los seres humanos como fragmentos incompletos, hechos completos solamente, en la unión con el otro”, escribió el obispo, en una cita directa del Libro de Disciplina, que sirve de guía para los metodistas.
Moreno Rivas destacó que el anhelo de equidad no se limita a beneficiar a las mujeres, sino que también aporta al desarrollo de mejores hombres.
“De igual manera, aspiramos a que los hombres puedan validar masculinidades saludables a través de las cuales puedan relacionarse sanamente con ellos mismos, con sus familias y comunidades”, sostuvo.
Sin embargo, reconoció que ha sido “limitada la inversión que como iglesia y sociedad hemos hecho en esa dirección”, por lo que invitó a las familias, las iglesias y los gestores de política pública a promover y apoyar el desarrollo de relaciones en “amor, respeto y equidad entre hombres y mujeres”.
Por otro lado, Moreno Rivas alertó sobre debates en las redes sociales que confunden la educación sexual con el tema de la educación con perspectiva de género.
“Son dos temas que se relacionan pero que no son lo mismo”, aclaró.
“Como discípulos y discípulas de Jesucristo tenemos el llamado de continuar el ministerio de nuestro salvador. Esto consiste en promover que tanto mujeres como hombres alcancen vidas plenas, en donde puedan ejercer los dones que Dios ha puesto en ellas y ellos. Ante este panorama, la Iglesia tiene un compromiso de justicia social y levantar su voz profética”, finalizó el obispo.
La Iglesia Metodista fue una de las casi 50 organizaciones cívicas, religiosas, profesionales y derechos humanos que este jueves aclararon dudas y reafirmaron su llamado a que el Departamento de Educación (DE) formule un currículo que integre la perspectiva de género.
La Ley 108 del 26 de mayo de 2006 ordenó al DE y a la Oficina de la Procuradora de las Mujeres crear un currículo con el componente de equidad, que hasta ahora no se ha concretado.