El Centro de Mando de la zona 2 del Negociado de Manejo de Emergencias y Administración de Desastres, que cubre varios municipios de la zona centro y norte de la isla, mantenía a su personal en alerta a medida que la tormenta tropical Laura avanzaba a zonas de Puerto Rico, pero hasta el momento, afortunadamente, no se había reportado ninguna situación de emergencia.

Según explicó Víctor Sánchez, director de la zona, a horas del mediodía no había surgido ninguna situación que requiriera la intervención de autoridades o rescatista relacionada con el paso de Laura. Tampoco había personas refugiadas en la zona, que comprende los municipios de Ciales, Corozal, Florida, Manatí, Orocovis, Morovis, Vega Baja y Vega Alta. No obstante, había cuatro refugios listos para recibir a las personas que pudieran necesitarlo, en Ciales (escuela Nueva Urbana), en Corozal (escuela Julián Marrero), Morovis (escuela Ángel Quintero) y Manatí (escuela Juan Sánchez y escuela Francisco Menéndez)

No obstante, el director Sánchez, advirtió que las cosas podrían complicarse en horas de la tarde cuando se espera que aumenten la intensidad de la lluvia y los vientos de la tormenta.

“La recomendación es a las personas que vivan en áreas inundables, cerca de cuerpos de agua, que tomen las medidas y se muevan a lugares un poco más altos. Y mantengan la calma”, afirmó Sánchez.

De igual forma, pidió a la gente “que no sean noveleros” y eviten meterse en situaciones de peligro.

“A veces pasamos por un cuerpo de agua, entiéndase por un puente, y vemos el río bien, pero cuando retornamos el cuerpo de agua ha crecido y puede ocasionar desgracia. Vamos a tomar todas las medidas de seguridad”, alertó.

Sánchez exhortó a la gente de la zona que agrupa esos ocho municipios a que, ante cualquier emergencia, se comuniquen a la zona de Nmead al teléfono 787-965-7770, “para que se atienda la situación. Nosotros estamos activados las 24 horas).

Antes, en un recorrido por Dorado, tampoco se reportaban situaciones de emergencia ni refugiados en ese municipio.

En el área solo se estaban reportando aguaceros, que esporádicamente eran un poco más fuerte por periodos breves. El viento tampoco había azotado con demasiada fuerza. De hecho, algunas personas, ignorando los llamados a no exponerse a situaciones de peligro, estaban en algunas playas practicando surfing.

No obstante, como advirtió el director de la zona 2, la situación podría empeorar en las próximas horas cuando se espera que el centro del sistema continúe moviéndose hacia el oeste muy cerca de Puerto Rico.