Los gritos de agonía de doña Santa Andino Quiñones despertaron sorpresivamente a los vecinos de la calle 5 en las Parcelas Suárez, de Loíza, en la madrugada del miércoles. Al ir a socorrer a la anciana de 78 años y asomarse a su residencia, ubicada en la parte posterior de un solar que comparte con una sobrina, la escena era dantesca.

La anciana, quien reside sola, estaba ensangrentada y pidiendo ayuda. Los vecinos, como pudieron, abrieron el portón que da acceso a la casa y lograron socorrerla.

Ayer, en el balcón, la ropa de cama y la bata que la anciana tenía puesta al momento del ataque yacían tendidas y lavadas sin rastro de sangre, como un ominoso recordatorio de un escalamiento que pudo haber terminado en tragedia.

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Según trascendió, un intruso escaló la residencia y reclamó a doña Santa que le entregara $4,000 en efectivo que guardaba en un cofre en su habitación. Sin embargo, el caco no contó con la temeridad de la anciana, quien tomó un machete y repelió el ataque logrando herir al ladrón. Durante el forcejeo,  doña Santa resultó herida en la mano izquierda y en la muñeca derecha, heridas que requirieron trasladarla de emergencia hasta el Hospital UPR de Carolina.

“Si esto llega a haber pasado hace 15 años, el tipo no hubiera salido vivo de esa casa”, indicó Guadalupe Quiñones, sobrina que, junto a su esposo, viven en una casa en la parte frontal del solar que comparten con doña Santa.

“Mi tía siempre ha sido una mujer bien fuerte y no le tiene miedo a nada. Es una mujer buenísima que ayuda a todo el mundo y siempre tiene una sonrisa, pero que no se metan con ella…", añadió Quiñones abundando sobre la determinación de su tía.

La sobrina de la víctima explicó que el individuo que penetró la residencia de doña Santa logró hacerlo rompiendo la ventana estilo Miami de la puerta de la cocina -que da hacia la parte trasera de la residencia- y, metiendo la mano, logró quitar el seguro y entrar fácilmente.

Sin embargo, luego de que la anciana se le fuera encima al ladrón este, ensangrentado, logró escapar con el dinero utilizando la misma ruta de entrada, no sin antes dejar atrás una camiseta que, curiosamente, la Policía declinó incautar como evidencia.

“El tipo salió corriendo por donde mismo entró, pero dejó esa camiseta tirada, pero se llevó el machete que él tenía y el de mi tía. Le dijimos a la Policía sobre la camiseta porque tiene sangre y puede servir para sacar el ADN del pillo, pero ellos dijeron que no les servía de evidencia”, explicó la sobrina.

“Pensamos que la persona que fue sabía del dinero porque ella dice que el tipo le preguntó dónde tenía escondidos los cuatro mil pesos”, añadió.

De armas tomadas

A pesar de que los vecinos de doña Santa la describieron como una mujer cariñosa, amable y siempre dispuesta a ayudar al prójimo, también aseguraron que es una fémina de armas tomadas y aseguraron que hizo lo correcto al enfrentarse al ladrón y no permitir ser un número más en las estadísticas de víctimas fatales en el País.

Asimismo, los residentes de la calle 5 dijeron lamentar el ataque contra la anciana y mostraron gran indignación con lo que catalogaron como “un abuso”.

El vecino de la residencia contigua a la de doña Santa -y quien pidió ser identificado únicamente como Wilfredo- explicó que fue él el primero en escuchar los gritos de la anciana.

“Yo me levanto siempre a las 4:00 de la mañana y escuché los gritos, pero pensé que se había caído. Como no me gusta entrar a una casa con una dama sola, busqué a una vecina y los dos entramos a ver qué pasaba, cuando la vimos ensangrentada tratando de abrir el portón. Agarramos la llave, abrimos y ahí ella se desplomó”, recordó el hombre aún consternado por el suceso.

“Nosotros nos conocemos hace años porque vivimos aquí de toda la vida. Yo la quiero a ella como una madre y eso que le hicieron no tiene nombre. Ya sabemos quién es el tipo y anoche lo vieron por la calle 6 y lo corrieron. La gente está bien molesta, si lo agarran, lo van a matar”, añadió el hombre con ojos llorosos.

Por su parte, Luis Márquez, también vecino de doña Santa, aún no salía de su asombro.

“Yo he vivido aquí toda mi vida y nunca había visto algo como esto. Aquí todos nos conocemos y nos cuidamos, pero eso me parece que pudo haber sido alguien que la conocía y sabía que ella tenía dinero guardado”, explicó el vecino.

“Esa señora es como su nombre, una santa. Ella se quedó sola porque el esposo murió el año pasado. Toda la comunidad está indignada con esto, yo espero que lo cojan rápido”, añadió.

Al cierre de esta edición, la condición de doña Santa, quien espera ser operada en el Hospital Universitario de Adultos, es estable y está consciente, aunque familiares dijeron que los doctores han indicado que la herida de la muñeca pudo haberle afectado varios tendones.