Mural de Ismael Rivera es vandalizado
El daño se hizo sobre el rostro del fenecido salsero, uno de los más importantes del país de todos los tiempos.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 11 años.
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El mural dedicado al sonero Ismael Rivera, ubicado en la calle Corona de Santurce, en San Juan, fue vandalizado con pintura blanca.
La presidenta de la Fundación Ismael Rivera y hermana del fenecido salsero, Ivelisse Rivera, dijo hoy, sábado, a este medio que a eso de las 11 a.m. de ayer pasó frente al mural y vio que las dos caras de “Maelo” que aparecen en la obra fueron cubiertas de blanco. El resto del mural no fue alterado.
Al momento se desconoce quién o quiénes son los responsables de este acto de vandalismo. No obstante, Ivelisse Rivera confirmó que el pasado abril un hombre amenazó con pasarle pintura blanca al mural. A ella no le consta, sin embargo, que este lo haya hecho.
Rivera contó que para esa fecha se proponía limpiar un terreno propiedad de la Fundación ubicado frente a la casa que le pertenenció a su hermano, en el callejón Concordia de la calle Ismael Rivera (antes Calma) en Santurce, pero había unos caballos ajenos. Agregó que cuando el dueño de los equinos apareció la insultó con palabras soeces, la amenazó de muerte y mencionó que dañaría el mural.
Ese caso llegó al tribunal y el hombre estaba obligado a reparar la verja del terreno, señaló Rivera. Las partes acudieron ayer al Tribunal de Primera Instancia de San Juan para dirimir el asunto.
“Él me pidió perdón, me dijo que aquel día él estaba mal y aseguró que había arreglado la verja. Ahí dejamos el caso, pero cuando yo salí del tribunal fui a la casa y vi que el trabajo de la verja no se había terminado. Luego pasé por el mural y lo vi vandalizado. Yo no puedo decir que fue él porque no lo sé, pero sí había amenazado con hacerlo”, relató la mujer en entrevista telefónica.
Rivera recabará nuevamente la intervención de la Policía Municipal de San Juan, que atendió el caso de la amenaza, pues su único interés, dijo, es continuar trabajando con la Fundación, cuya sede es la casa del callejón Concordia, y sus planes de establecer allí un museo con memorabilia de Maelo.
“Yo estoy defendiendo el legado de Ismael y no voy a dejarlo porque haya bandolerismo. Voy a seguir haciendo mis proyectos. La Policía que se encargue de lidiar con estas personas”, sentenció.
Este no es el primer problema que enfrenta Rivera en el pasado año, pues en diciembre agentes de la División de Drogas de San Juan arrestaron dentro de la sede de la Fundación a siete personas que habían entrado ilegalmente y convirtieron el lugar en un punto de drogas. Durante esa intervención se ocupó marihuana, cocaína y dinero en efectivo. Las autoridades dijeron entonces que el grupo había roto el candado de la propiedad para montar su negocio ilícito.