Como si fuera un 14 de febrero, los dueños y encargados de moteles en la Isla vieron anoche las filas de carros repletos de familias que esperaban por una habitación para pasar la noche.

El acondicionador de aire, la televisión, un receptáculo para cargar los celulares y el “room service” fueron los principales atractivos en momentos en que la mayoría del país permanece sin luz eléctrica, consideró Pamela López, secretaria y supervisora en el motel Villa Borinquen, en Bayamón.

“La gente estuvo haciendo filas en sus carros por horas. Muchos clientes pagaban dos turnos y se quedaban más de ocho horas”, contó sobre el escenario que vivió anoche en el motel de 55 habitaciones, cuyos precios fluctúan entre los $35 y los $99.

“Venían con familiares y como lo que hay es una cama, pedían 'mattress' adicionales para ponerlos en el piso… Esto fue impresionante y si sigue así, pasará esta noche de nuevo”, pronosticó.

López comentó que llegó a ver madres y padres con niños con necesidades especiales que necesitaban conectar algún equipo eléctrico.

El hotel Flor Del Valle, también conocido como Tío Flor, en Cidra, también experimentó una demanda similar.

“Se ocuparon casi todas las 90 habitaciones”, concedió el supervisor Juan Sierra. “Vinieron muchas familias con hijos a descansar, a tener agua caliente… Tenemos 12 'mattress' adicionales y todos se usaron”.

En Tío Flor, dijo, una situación como la se experimenta por el apagón de ayer, ha motivado a la gerencia a conceder gratuitamente uno o dos horas adicionales a las ocho que se cobran en la tarifa básica.

También, a pesar de que el uso de la planta eléctrica supone costos adicionales, han mantenido los precios de las habitaciones, que empiezan en los $29.

Leve aumento en los paradores

Mientras, los paradores han servido como el resuelve de muchos puertorriqueños residentes en la Isla que han querido evitar la incomodidad del calor y la falta de agua, pero manteniéndose cerca de sus casas en los pueblos fuera del área metropolitana.

Las reservaciones de última hora, desde que se anunció que la espera por el restablecimiento del servicio sería larga, han significado un aumento en ocupación en este tipo de hospederías de cerca de un 10%, según describió el presidente de la Asociación de Dueños de Paradores, Tomás Ramírez.

“Donde estamos localizados no vamos a tener una avalancha de gente”, resaltó al observar que el fenómeno de reservaciones de última hora masivas fue visto más intensamente en el área metropolitana de parte de personas que tienen que trabajar en San Juan y viven en los pueblos aledaños.

Muchos de los paradores se encuentran en las costas o montaña adentro.

“La mayoría de los que han llamado a los paradores son gente de la comunidad o de los pueblos cercanos que sí conocen la hospedería. Están buscando la comodidad del acondicionador de aire, la cocina, el agua, el desayuno… Son gente de unas ocho a 10 millas alrededor”, describió el también codueño del parador Combate Beach Resort en Cabo Rojo.

En su caso, mencionó, consiguió ocupar unas cuatro o cinco habitaciones más de las que tenía reservadas para anoche.

Esto ocurre en la temporada más baja para el turismo en la Isla, debido al comienzo de clases en Puerto Rico y Estados Unidos.

Ocupación no es igual a ingresos

Ramírez indicó que a pesar del leve aumento en ocupación, el impacto no necesariamente representa un aumento en ingresos, pues el apagón ha significado un incremento en costos operacionales, como la compra de diésel para las plantas generadoras de electricidad y el pago a personal de seguridad adicional.

Además, muchos bajaron sus precios como un gesto de servicio ante la necesidad por la emergencia.

“Las personas han buscado nuestras hospederías como una solución temporera y los precios los bajamos para que utilicen las habitaciones que tenemos disponibles”, apuntó Ramírez.

Operan con normalidad casinos y aeropuerto

Por su parte, la directora ejecutiva de la Compañía de Turismo, Ingrid Rivera Rocafort, precisó que otras áreas de la industria turística han continuado operando con normalidad.

“Los casinos operaron de forma regular, las recaudaciones se hicieron de forma regular. De los hoteles, la información que tenemos es que gran parte de ellos aumentaron su ocupación significativamente, incluso algunos lanzaron ofertas por las redes sociales”, indicó por escrito.

El aeropuerto internacional Luis Muñoz Marín también opera sin percances, agregó.