La Junta de Licenciamiento y Disciplina Médica determinó que no hubo violaciones al Código de Ética por parte de los galenos que tomaron fotografías a los haitianos mientras recibían sus servicios luego del terremoto, porque las imágenes sirvieron para documentar la labor realizada.

El presidente del organismo, Richard M. de Andino, aseguró que “no se encontró evidencia clara, contundente y precisa de violaciones éticas” por parte de los médicos.

Según la oficial investigadora Luz M. Ríos, las fotos, que muestran pacientes en medio del tratamiento o médicos con armas o bebidas alcohólicas, “fueron malinterpretadas”.

“No eran circunstancias normales con protocolo, consentimiento por escrito… era una situación catastrófica que les impactó tanto que dijeron tenemos que documentar porque Puerto Rico no está lejos de una catástrofe como este”, alegó Ríos.

Explicó que los médicos crearon un portal para intercambiar las imágenes entre ellos, pero de 25 a 35 fotos se filtraron a través de una red social cibernética, lo que levantó consternación alrededor del mundo.

“Eran 1197 fotos, pero se publicaron de 25 a 35 fotos que provocaron ira, nadie lo puede negar. El mundo se hubiera dado cuenta que no eran para burlarse (si se hubieran publicado todas), pero se manchó la clase médica”, afirmó Ríos, quien señaló que desconoce la motivación para publicara las imágenes.

Además, criticó que la prensa estuviera “dale que dale por más de un mes con los médicos, cuando eran paramédicos muchos de los que aparecían en las fotos”.

Dijo, también, que a muchos de los pacientes tuvieron que escribirle el diagnóstico en sus cuerpos porque no había papel, o tomarle las fotos para enviarlas por internet a especialistas fuera de Haití.

“En el caso de la foto de un paciente (que una gaza tapaba sus genitales) era un hombre, no una mujer como se dijo y se tomó la foto porque tenía múltiples fracturas” y debía enviarse la imagen a un médico fuera de ese País.

En otra de las imágenes se muestra a un médico frente a un ataúd, pero según Ríos se trataba de un zafacón y “el médico estaba protestando porque eso estaba ahí”.

Sobre las fotos con armas y bebidas alcohólicas, comentaron que los médicos querían recoger el cuadro completo de su participación en Haití y la República Dominicana, y que cuando fueron tomadas ya habían terminado su labor.

La investigación, que estableció precedente para la Junta porque decidieron que tienen jurisdicción en investigaciones relacionadas a las acciones éticas de galenos fuera de Puerto Rico, provocó que se promuevan cambios en la educación continuada de los médicos.

“Para la recertificación de los médicos el año que viene, 2011, para la que toman 60 créditos de educación continuada, tendrán que tomar 6 créditos en ética porque nos dimos cuenta que desconocían el Código de Ética”, explicó de Andino.

Criticaron que vandalizaran el vehículo de uno de los médicos, agredieran a una enfermera luego de salir de su trabajo, presuntante como represalia por las fotografías y afirmaron que varios galenos tuvieron que contratar servicios de relaciones públicas para mejorar la imagen de sus oficinas.