La Guardia Nacional de Puerto Rico recibió hoy, viernes, a ocho de los nueve aviadores que fallecieron en el accidente del WC-130 en Savannah, Georgia, el pasado el 2 de mayo.

En lo que se conoce como “El Regreso Digno”, los caídos recibieron los honores militares correspondientes a su llegada a la Base Aérea Muñiz, en Carolina. El noveno tripulante, David Albandoz, será sepultado en el estado de Alabama, a petición de su esposa.

“Estamos recibiendo a nuestros héroes con todos los honores que tradicionalmente se presentan a los militares caídos en el cumplimiento del deber”, dijo en declaraciones escritas el ayudante general de Puerto Rico, Isabelo Rivera.

“Este es un momento solemne y al a vez lleno de sentimiento en donde las familias reciben a sus seres queridos y se preparan para el proceso fúnebre. No habrá ceremonia que logre mitigar el dolor que representa la pérdida de nuestros compañeros”, añadió.

Líderes y miembros de la Guardia Nacional rindieron el saludo militar a los féretros cubiertos por la bandera de los Estados Unidos mientras eran escoltados por una guardia de honor de la Fuerza Aérea.

El gobernador interino Luis G. Rivera Marín estuvo presente en representación de Ricardo Rosselló.

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“A nombre del gobernador de Puerto Rico Ricardo Rosselló, recibimos con la mayor solemnidad y respeto a sus familias, los restos de los valientes hombres, miembros de la Guardia Nacional de Puerto Rico a quienes honramos, para que descansen en paz en su Tierra, y los honramos por su  patriotismo. Hay tristeza, pero sobre todo un enorme agradecimiento por su sacrificio y servicio en bien de nuestra Nación Americana", expresó Rivera Marín.

Por su parte, el comandante del Ala de Transporte Aéreo 156, Raymond Figueroa, indicó que “aunque nuestras tradiciones militares muestran el respeto que nuestros compañeros merecen, no hay ceremonia que pueda sanar las heridas causadas por su pérdida pues ellos también eran esposos, padres, hermanos, hijos, sobrinos, primos y hermanos. Nuestros aviadores están ahora de regreso en su tierra. Son boricuas, son bucaneros y estarán por siempre en nuestros recuerdos”.

Los aviadores fueron escoltados hasta los carros fúnebres que los llevaron a las diversas funerarias donde sus familiares oficiarán los velatorios correspondientes y la eventual sepultura.

“Aunque nuestros héroes ya llegaron a la Isla nuestra misión con las familias no termina aún. Continuaremos dándoles todo el apoyo que ellos requieran de nosotros, cada uno de ellos son parte de la familia de la Guardia Nacional de Puerto Rico”, sostuvo Rivera Marín.