El COVID-19 ha provocado una merma en las pruebas de detección temprana de cáncer.

Según estadísticas provistas por el doctor Guillermo Tortolero, director de la División de Control de Cáncer y Ciencias Poblacionales del Centro Comprensivo de Cáncer de la Universidad de Puerto Rico, en el 2020 las mamografías bajaron en un 34%, las de detección de cáncer colorrectal en un 47% y en un 27% la prueba de detección de cáncer cervical. Estos datos se obtuvieron de los servicios contratados por la Administración de Seguros de Salud, bajo el plan de salud Vital.

En un análisis de pacientes afiliados a planes privados o beneficiarios de Medicare Advantage, también arrojó que para el 2020 hubo una reducción de visitas para pruebas de detección temprana de cáncer. A modo de ejemplo, comentó que en el caso de las mamografías de personas mayores de 40 años se registró una baja de un 11% en comparación con el año previo.

En entrevista con Primera Hora, el galeno señaló que esta baja en pruebas de detección temprana de cáncer ocurrió también a nivel mundial.

“El COVID pone a más gente fuera de obtener estos exámenes por el tiempo adecuado y sabemos que uno de los problemas es que si no lo haga ahora, a lo mejor no lo hago hasta el siguiente año. Se pone en el calendario para después y probablemente la gente no lo llegue a hacer”, manifestó.

Tortolero recalcó que es importante hacerse estas pruebas de cernimiento, en especial la de las principales causas de cáncer en la Isla. Estas son las de colorrectal, mama y cervical.

Señaló que “es importante (detectar temprano el cáncer), porque sabemos, se ha demostrado que el cernimiento salva vidas, que la detención temprana, un diagnóstico temprano, permite que el paciente tenga un inicio de tratamiento más oportuno y donde los resultados sean mejores y la calidad de vida para el paciente sean mejores, su sobrevida sea mejor. Así que hay bastantes razones por lo cual es importante hacerse el cernimiento”.

La meta nacional de pruebas de cernimiento es que alcancen a un 80% de la población. Para lograr aumentar a estos niveles o sobrepasar la cifra ante esta baja experimentada, el Centro Comprensivo de Cáncer se ha unido a más de 10 organizaciones de salud y de alcance comunitario para lanzar una campaña para instar a los boricuas a que se realicen las pruebas.

La campaña publicitaria se ha titulado “Amenaza Invisible”. La misma invitará a los pacientes a acudir a su médico y realizarse las pruebas de detección temprana de cáncer, aun en medio de la emergencia sanitaria por COVID-19.

“Parte de la idea es poder motivar a la gente. Que, además de lidiar con el COVID, tenemos que seguir viviendo con el resto de las necesidades de salud para poder mantener la salud y una de ellas es las pruebas de cernimiento”, afirmó el doctor.

Comentó que los médicos y hospitales tiene protocolos establecidos para evitar los contagios de coronovirus, por lo que no es peligroso acudir a hacerse estas pruebas.

Según las recomendaciones médicas generales, las mujeres de 40 años o más deben realizarse una mamografía anual, mientras los exámenes de detección de cáncer de cuello uterino y pruebas de VPH se deben realizar a partir de los 21 años.

También es recomendable que tanto hombres como mujeres entre 45 a 75 años se hagan una colonoscopía para detectar cualquier anomalía que pueda provocar cáncer colorrectal.