“La pandemia persiste en Puerto Rico”
Salubristas instan a no bajar la guardia contra el coronavirus.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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Aunque las hospitalizaciones por COVID-19 han reflejado un leve aumento en los últimos días, las cifras no representan, al momento, una amenaza de colapso del sistema de salud por lo que diversos salubristas aconsejan a la ciudadanía a no bajar la guardia, pues Puerto Rico continúa en una situación de emergencia a causa del coronavirus.
Información provista en la plataforma de datos del Departamento de Salud indica que ayer había 114 personas hospitalizadas tras haberse contagiado con el virus de SARS-CoV-2. De estos, 15 están ingresados en alguna unidad de cuidado intensivo y nueve están conectados a un ventilador. La cifra máxima de admisiones diarias vinculadas a la COVID-19 en el último mes ha sido de 125 casos, de acuerdo al censo que se hace en los 68 hospitales de la isla.
Aunque para el neumólogo Luis Nieves Garrastegui el aumento en ingresos es leve la población debe mantener la defensiva que ha demostrado desde un inicio contra el coronavirus en términos de prevención y seguridad.
Dijo que en momentos en que se comienzan a flexibilizar algunas actividades recreativas, laborales y comerciales en el país es imperativo que los puertorriqueños comprendan que el panorama no debe estar regido por la falsa apariencia de que se libró la batalla contra la enfermedad que en un periodo de tres meses ha ocasionado la muerte de 140 personas.
El último reporte del Departamento de Salud indica que entre pruebas moleculares y las serológicas la suma total de casos en Puerto Rico relacionados al coronavirus es de 4,508. Es importante señalar que las pruebas serológicas (las cuales miden anticuerpos en una persona y podrían ser indicativos de que tuvieron en algún momento el virus) no son pruebas diagnósticas para la enfermedad de la COVID-19, aun cuando la agencia ha insistido en agregarlas a la estadística como “casos únicos positivos”. Al momento, hay 1,322 casos positivos por pruebas moleculares, mientras el total de resultados a pruebas serológicas asciende a 3,186.
“No hay duda de que después que el pueblo de Puerto Rico se portó como un general y logró bajar la incidencia a números tan bonitos que teníamos hasta antes del Día de Madres, ahora vamos a ver aumentos. En todas las jurisdicciones del mundo siempre que hay una apertura de comercios y que se liberan algunas cosas siempre hay una segunda oleada y eso es algo que todos esperamos… y en los hospitales sí hemos visto un aumento de casos clínicos después de la liberación que se ha dado en las pasadas semanas, pero no ha sido algo tan alto como que vaya a colapsar el sistema de salud”, acotó.
Reiteró que el efecto, si alguno, de la apertura de los centros comerciales que ocurrió el lunes se observará entre los próximos 14 a 21 días.
“Los casos que estamos que estamos viendo hoy no tienen que ver nada con la reapertura de los pasados días. Estos son el resultado de las reuniones familiares y fiestecitas entre amigos que ocurrieron para el wikén de madres o después de esos días, el cual coincide también con la flexibilidad que se hizo en otras pocas cosas”, dijo al resaltar que también se han atendido casos donde el contagio desencadenó a través de viajeros.
Nieves Garrastegui dijo que para abril se llegaron a reportar hasta 325 casos de hospitalizados por COVID en un día, pero luego “la situación se estabilizó y esos números empezaron a bajar”.
“No puedo decir que es un pico, porque acuérdate que lo que vemos los clínicos en hospital es solo el 20% del total de los infectados, pues el otro 80% no requiere hospitalización”, dijo al destacar que el uso máximo de ventiladores que se ha utilizado en un periodo de un día fue de entre 55 a 60.
“Pero quiero hacer énfasis en que estamos bien significativos todavía. La pandemia persiste en Puerto Rico y todavía tenemos esos pequeños focos de contagio de los que surgen en fiestas, reuniones familiares… decir que no es alarmante no es correcto porque sí lo es. El hecho de que tengamos COVID en Puerto Rico es motivo de preocupación y no podemos bajar la guardia en ningún sentido”, dispuso.
Por su parte, el presidente del Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico, Víctor Ramos, coincidió en que el aumento en las hospitalizaciones sí se ha percibido, pero “no ha sido algo dramático o con el efecto de un descontrol”.
Ramos tocó base sobre los recientes números vinculados a la prevalencia del coronavirus en la isla, según los registros en los informes de Salud, los cuales evidencian un aumento en los reportes diarios. Por ejemplo, ayer se reportaron 130, el jueves se reportaron 88, el martes 62 y el lunes 97.
Según Ramos, hay tres razones para el alza primero que hay más pruebas disponibles, segundo que las empresas están reabriendo y entonces hacen pruebas a sus empleados y tercero que hay un alza en las interacciones sociales.
“No es una situación de alarma, pero hay que seguir monitoreando con las pruebas y los rastreos. Hay que procurar ajustar el monitoreo para que haya un sistema único para toda la isla. Eso es esencial en medio de las reaperturas. Y, honestamente, lo más que me preocupa son los casinos, porque sabemos la demografía de personas que van a estos lugares y que son mayores de edad. Se debe establecer un protocolo bien estricto si es que se va a incluir que abran en la próxima fase, como se ha hablado”, expresó.
Las estadísticas de Salud en cuanto al sistema de vigilancia de rastreo de personas que tuvieron contacto con positivos al COVID-19 se publica todos los viernes. Según el reporte del 29 de mayo, de los 3,647 casos que se habían acumulado hasta ese momento, la agencia logró contactar a 2,009 personas para comenzar la investigación de contactos. De este grupo, el 74.6% o lo que representa 1,499 positivos les informó de al menos un contacto.
“El 95.7% de los contactos referidos fueron contactados y monitoreados por el equipo de rastreo de contacto”, dice el informe. El grupo que no fue contactado, unas 148 personas, se debió a que el número telefónico estaba erróneo, no respondió o la personas declinó a participar. Mientras, de los 1,499 casos investigados, unas 370 personas dieron positivo a la prueba molecular. Esto representa un 10.6%.
Mientras tanto, Ramos insiste en que hay que continuar tomando medidas cautelares como el uso de mascarillas, la higiene en las áreas de trabajo, continuar con los lavados de manos y el distanciamiento físico de más de seis pies. Recordó, además, que si se establece que hay sobre 4,000 contagios desde que se detectó la enfermedad en la isla, esto es indicativo de que pudiera haber hasta 40,000 con el virus, pero que la mayoría de estos son asintomáticos.
De otra parte, Jaime Plá, presidente de la Asociación de Hospitales, aseveró “no ha habido un cambio sustancial en el número de pacientes hospitalizados por COVID” y que, actualmente, los 114 reportados al día de ayer representan “menos del 1% de las camas que están ocupadas” en las diferentes instituciones del país. “Igual ocurre con los ventiladores”, agregó.
“En Puerto Rico hay aproximadamente 1,128 ventiladores y de esos están en uso 269… y de esos nueve solamente son de COVID”, expuso.
El 7 de mayo el Departamento de Salud reportó por primera vez que la cifra de pacientes hospitalizados por COVID-19 en Puerto Rico ascendía a 164, de los cuales 18 eran adultos en la unidad de cuidado intensivo. La agencia indicó que de esos casos en intensivo había 14 ciudadanos conectados a un respirador artificial.
La dependencia gubernamental informó, entonces, que el total de personas adultas hospitalizadas en la isla era de 3,284 pacientes, mientras que en la población pediátrica había unos 317.
La agencia ha sostenido que en Puerto Rico no ha habido pacientes pediátricos en intensivo ni utilizando un respirador artificial a causa del coronavirus en ningún momento.